CASTELLÓ. El sector azulejero cerrará por segundo año consecutivo un ejercicio estable, con un crecimiento prácticamente plano y repitiendo casi los resultados de 2024. Un comportamiento destacable si se tiene en cuenta la incertidumbre internacional generada por las políticas arancelarias impulsadas por el expresidente estadounidense Donald Trump. Según las estimaciones trasladadas este jueves por la patronal Ascer para 2025 -a falta del cierre definitivo del año-, las ventas nacionales crecerán entre un 3% y un 5%, mientras que las exportaciones se mantendrán en una horquilla de entre el -3% y el 0%. La facturación global oscilará entre el -1% y el 1%, y la producción entre un 0% y un 3%. Por su parte, el empleo registra una mejora del 3%.

El presidente de Ascer, Ismael García, ha subrayado en un encuentro con los medios de comunicación que 2025 “ha sido un año digno y estable”. Además, García ha afirmado que el arancel del 15% impuesto por Estados Unidos “ya ha sido asumido por el sector”, y ha explicado que, tras un importante ascenso en el primer semestre en las ventas en EEUU -debido al acopio de producción ante los anuncios de Trump-, se produjo un cierto freno durante el verano que se ha intentado recuperar en la última etapa del año.

Por su parte, según los datos aportados por el secretario general de Ascer, Alberto Echavarría, la producción se situará en torno a los 420 millones de metros cuadrados y la facturación alcanzará los 4.800 millones de euros. Se trata de una leve mejoría registrada “en un contexto de máxima volatilidad e incertidumbre comercial, en el que la única certeza que tenemos ahora mismo es regulatoria y nada positiva”, ha señalado Echavarría.

Estas previsiones coinciden con las valoraciones trasladadas por diferentes empresas del sector, que han destacado una mejora en el cierre del ejercicio, especialmente en España y en la Unión Europea. Asimismo, España ha logrado recuperar la primera posición como proveedor de cerámica en Estados Unidos, en detrimento de India, que se ha visto más afectada por los aranceles, al soportar gravámenes superiores al 60%.

La amenaza de la UE en 2026: el sector más implicación al Gobierno

De cara a 2026, el sector muestra su preocupación por el impacto que podría tener la decisión de la Comisión Europea de reducir un 34% las asignaciones gratuitas de CO₂, así como por un posible recorte de las retribuciones a la cogeneración por parte del Gobierno. Estas medidas supondrían un coste adicional de entre 140 y 190 millones de euros para la industria cerámica.

Según García, estas decisiones perjudicarán “gravemente a nuestro comercio” y dejarán al sector en desventaja frente a competidores de terceros países que no afrontan estas exigencias regulatorias.

La patronal lanzó la voz de alarma hace dos semanas en una reunión celebrada en Bruselas en el seno de Ceramie-Unie y ahora reclama un mayor apoyo institucional para revertir la regulación prevista por la Comisión Europea. En especial, Ascer solicita una mayor implicación del Gobierno central, que, según García, aún no ha respondido a sus peticiones de reunión, a diferencia de lo ocurrido en Italia.

El sector subraya que se trata de una industria clave para la provincia de Castellón, de la que dependen "unas 75.000 familias". La nueva normativa, si no se congela, se aplicará a partir del final del primer trimestre de 2026.

“Nos enfrentamos a un desafío importante en materia regulatoria, especialmente en el ámbito de las emisiones y la reducción de las asignaciones gratuitas prevista para el periodo 2026-2030, que marcará buena parte de la agenda institucional de Ascer el próximo año”, ha remarcado el presidente de la organización empresarial, quien ha destacado que ya cuentan con el respaldo de la CEOE.

Tres vicepresidencias

Por último, Ismael García ha presentado las nuevas incorporaciones a la Junta Directiva de Ascer tras la reciente Asamblea General Electoral celebrada el pasado 12 de diciembre. La vicepresidencia se refuerza con la incorporación de Manuel Ángel Murillo y Raúl Carnicer, que se suman a Miguel Nicolás, recuperando así las tres vicepresidencias para afrontar una etapa que se prevé especialmente exigente para el sector.