VALÈNCIA. Dentro las infracciones de tráfico, ha diferente grado de conocimiento por parte de los conductores. Sanciones por exceso de velocidad, consumo de alcohol o drogas al volante o bien utilizar el teléfono móvil cuando se maneja el vehículo son evidentemente las más conocidas. Sin embargo, hay otras acciones que pueden derivar en una multa que son menos habituales o bien las autoridades acaban obviando.

Estas son las multas inesperadas que pueden poner a los conductores:

Un conductor que come, bebe, se maquilla o lee el periódico, es mejor que lo deje de hacer, incluso si está en un semáforo. Además de desviar la atención de la carretera y su entorno, puede originar una multa de 200 euros con retirada de dos puntos en el carnet. 

En segundo lugar, hay conductores sin camiseta, con chanclas, tacones o incluso descalzos. Es otro motivo más de multa, concretamente de 200 euros debido a que esta indumentaria puede impedir controlar adecuadamente el vehículo.

Por otro lado, es frecuente observar a conductores con el brazo apoyado por fuera de la ventanilla, una conducta castigada con 80 euros. Otra maniobra que puede ser sancionada es ir en el coche con el volumen del equipo de sonido demasiado alto, especialmente si se hace cerca de un hospital o zona considerada de descanso, porque conlleva una multa que puede variar entre los 80 y los 100 euros, incluso podría superar los 2.000 euros si las molestias a los vecinos son repetidas.

El Reglamento General de Circulación también incluye una sanción de 80 euros para quienes utilicen señales acústicas de sonidos estridentes, entre ellas, tocar el claxon de forma continuada. Este comportamiento solo está permitido en caso de situación de emergencia o para avisar a un conductor al realizar un adelantamiento.

También pueden multar a los conductores con 80 euros si se ponen pegatinas, publicidad o adornos en el coche que dificulten la visibilidad. Con 100 euros si se inicia la marcha realizando un derrapaje o bien con hasta 80 euros si se ofrece una muestra de cariño o discusión con otra persona dentro del coche. Tampoco hay que despistarse cerca de la gasolinera cuando se acude a repostar el vehículo porque si se hace con el motor arrancado, las luces o la radio puesta, la sanción puede alcanzar los 200 euros y la retirada de tres puntos en el permiso de circulación.