VALÈNCIA. València, como cualquier gran ciudad, es hogar de vecinos de múltiples nacionalidades y orígenes. Según datos del padrón municipal, a comienzos de 2024, casi uno de cada cinco vecinos de la ciudad (un 18,5 %) tenía nacionalidad extranjera. Sin embargo, la población extranjera no se distribuye de manera uniforme entre los distintos distritos de la ciudad. Algunas zonas como Ciutat Vella o l’Olivereta concentran un porcentaje mayor de población foránea, mientras que distritos como el Pla del Real o Poblats del Nord son las áreas con menos residentes extranjeros de la ciudad. Además, ateniendo al lugar de procedencia de estos vecinos, los datos también arrojan una distribución irregular en la ciudad. Mientras la población proveniente de países de la Unión Europea es la mayoritaria entre los extranjeros residentes en Ciutat Vella, en distritos como Rascanya o l’Olivereta la mayor parte de sus vecinos foráneos provienen de países de América del Sur.
Ciutat Vella, Rascanya o l'Olivereta: distritos con más vecinos extranjeros
El distrito céntrico del Cap i Casal, con un 26,9% es la zona con mayor porcentaje de población extranjera respecto de su censo total. En concreto, 8.076 vecinos del total de 30.000 de Ciutat Vella tienen nacionalidad extranjera. El segundo distrito con más residentes expatriados es l’Olivereta, que concentra los barrios de Nou Moles, Soternes, Tres Forques, La Llum y la Fuensanta. En estos barrios un 24,5% de sus vecinos son foráneos. En total unos 12.587, según datos del Ayuntamiento de València. El tercer distrito de la ciudad con más extranjeros en comparación a su censo total es Rascanya. Esta zona, que engloba los barrios de Orriols, Torrefiel y San Lorenzo, cuenta con un 23,15% de residentes extranjeros. Por encima de la media de la ciudad se sitúan también zonas de la fachada marítima de València como Poblats Marítims (20,11%) o Camins al Grau (19,76%). También rebasan la media Cuatre Carreres (19,27%); La Saïdia (19,28%); Jesús (19,05%) o Benicalap (19,04%).
Por contra, áreas como Poblats del Nord a penas supera el 9% de población extranjera, en términos absolutos, 638 personas residentes en estas zonas tienen nacionalidad extranjera. El Pla del Real, que abarca los barrios de Exposició, Mestalla, Jaume Roig y Ciutat Universitària, es el segundo distrito con menos vecinos foráneos en comparación a su censo total, con un pocentaje del 11,7% y un total de 3.655 vecinos procedentes de otros países. Patraix, con casi un 12,8% de residentes expatriados también se sitúa por debajo de la media de la ciudad.
Más allá del porcentaje total de extranjeros, el lugar de procedencia de los residentes foráneos también refleja diferencias por distritos. En total, la ciudad de València acoge a 153.730 residentes de otras nacionalidades (a enero de 2024). El colectivo más numeroso, con casi 49.000 personas, proviene de países de América del Sur. La segunda área de procedencia más destacada son los países de la Unión Europea, con 38.000 residentes, seguidos por Asia (20.500) y el resto de Europa (19.700). De hecho, este mismo lunes la alcaldesa en funciones, María José Ferrer San Segundo, se reunía con la nueva delegada del Consell para la Hispanidad, Mary Ponte, para abordar los "retos de la administración con los nuevos valencianos procedentes de latinoamérica". En total, y según cifras del consistorio, son 68.214 los residentes en València procedentes de países latinoamericanos. Sin embargo, la procedencia de los residentes también muestra un patrón desigual entre los distintos distritos de la ciudad.
La mayoría de vecinos foráneos procede de Sudamérica
De hecho, aunque Sudamérica es el continente de procedencia de la mayoría de extranjeros que residen en la capital del Turia, en el distrito de Ciutat Vella, la mayor parte de sus residentes foráneos proceden de países de la Unión Europea. En concreto, más de un 9% del total de vecinos de los barrios del centro procede de alguno de los veintisiete países de la unión. Le siguen los residentes procedentes de América del Sur, que representan el 5,9% del censo de Ciutat Vella. Tras estos, se sitúan los vecinos con nacionalidades de países europeos no comunitarios, que son el 4,1% del total de residentes. Los extranjeros procedentes de África que habitan en este distrito suponen el 2,7% y los procedentes de América del Norte el 2,3%. Los extranjeros con origen asiático o centroamericano son algo más del 1% en Ciutat Vella.
A diferencia de los barrios del centro de la ciudad, el lugar de origen mayoritario de los residentes extranjeros de l’Olivereta es América del Sur, de donde provienen el 9% de sus vecinos. También en Rascanya los vecinos procedentes de países del sur de América suponen el 8,9% del censo total. El segundo colectivo por peso porcentual en l’Olivereta es el de los vecinos foráneos procedentes de Asia, que son casi el 5% del total. Le siguen los extranjeros de origen europeo comunitario (4%). En Rascanya en cambio son los residentes de origen africano el segundo colectivo de vecinos extranjeros más mayoritario, representando el 3,4% del total de su población. En este distrito, los vecinos de origen asiático y los de países de la Unión Europea representan el mismo porcentaje de población, el 3,2% del total.
Se da la circunstancia que en un distrito con bajo porcentaje total de residentes extranjeros como Pla del Real, los vecinos procedentes de países de la Unión Europea suponen el 6% del total de la población del distrito, el tercer porcentaje más alto para este colectivo solo por detrás de Ciutat Vella y Poblats Marítims. Sin embargo, en este distrito los extranjeros procedentes de América del Sur (segundo colectivo más mayoritario en la zona) se sitúan por debajo de la media del resto de la ciudad y a penas representan el 3,1% de su población.
En buena medida, estas diferencias en la distribución de la población extranjera responden a factores como el precio de la vivienda, la oferta laboral o la tradición de acogida de determinados barrios. Mientras que zonas céntricas como Ciutat Vella concentran una población extranjera más diversa en parte gracias a su carácter turístico distritos como Rascanya o l’Olivereta concentran mayor porcentaje de vecinos de origen latinoamericano, africano o asiático coincidente con un mercado inmobiliario más asequible. En cambio, áreas residenciales con rentas más elevadas, como el Pla del Real, presentan una menor presencia de población foránea, aunque destacan por albergar un mayor peso de vecinos europeos. De este modo, los datos del padrón municipal reflejan no solo el origen diverso de los nuevos valencianos, sino también dejan entrever dinámicas sociales y económicas que configuran la vida en cada barrio de la ciudad.