VALÈNCIA (EP). La alcaldesa de València, Mª José Catalá, ha anunciado que la junta de gobierno local de este viernes impulsará la creación de una oficina antiokupación en la ciudad, que desarrollará "políticas muy contundentes" para evitar esta problemática.
Catalá, en una visita a unas obras de viviendas de la empresa municipal Aumsa, ha explicado que el Ayuntamiento se ha puesto en contacto con otras ciudades que llevan "un largo recorrido en esta cuestión, como Badalona", para la puesta en marcha de esta oficina.
Se trata de un "compromiso electoral" que arrancará con la aprobación de "la primera moción impulsora" para la creación de una oficina antiokupación. Según ha avanzado, será un órgano centralizado mediante el que "todas las personas que sufran en su comunidad de propietarios una okupación irregular" serán atendidos para "desarrollar directamente una acción pública" y así "evitar que esas situaciones sucedan".
"Toda vivienda okupada o toda vivienda que sea un piso de alquiler turístico para nosotros es una vivienda menos para un joven", ha advertido la primera edil.
Respecto a si el Ayuntamiento tiene constancia de muchas denuncias por okupación, ha emplazado a la puesta en marcha de la oficina y ha explicado que las maneja la Policía Local. "Lo que queremos hacer es unos protocolos transversales con otros departamentos del Ayuntamiento y, evidentemente, cuando se cree esa oficina estamos seguros de que las denuncias van a incrementarse, porque la gente va a poder ver que tiene una herramienta para combatir una okupación irregular", ha augurado.
"No es un problema que sufra especialmente València"
Posteriormente, tras un acto en el Mercado de Colón, Catalá ha asegurado que este viernes se ofrecerán datos sobre la okupación en la ciudad, si bien ha remarcado que "no es un problema que sufra especialmente València" sino que se produce a nivel estatal "en todas las grandes ciudades".
"Lo que sí que tenemos en València es un gobierno convencido de que una vivienda que está okupada es una vivienda menos para la gente que necesita vivir y que tiene derecho a tener una vivienda. Por tanto, frente a otras estrategias políticas a nivel nacional que favorecen a la okupación, la ciudad de València dice no a la okupación y dice no al uso de viviendas para uso turístico a nivel irregular, como estamos haciendo", ha subrayado.
Por otro lado, la alcaldesa ha destacado la apuesta del Ayuntamiento por el alquiler asequible y por la vivienda de protección oficial, "una VPO donde una pareja joven pueda construir su proyecto de vida y iniciar su proyecto de vida comprando su primera vivienda". "Y eso es lo que desde luego vamos a hacer. En un año y diez meses (de gobierno), 955 viviendas de ese compromiso de mil viviendas ya están de alguna manera en marcha, y ya hemos entregado 168 llaves -ha apuntado-. Estamos muy satisfechos y vamos a seguir adelante con esta política".
Sobre el proyecto de viviendas de Aumsa que ha visitado en calle Hortolanes, en Poblats Marítims, ha avanzado que lo tramitará directamente la empresa municipal y que estarán destinadas a jóvenes con ingresos "que tengan un rango de edad menor a 40 años" y que "quieran desarrollar aquí su primer proyecto de vida".
"Auténtica barbaridad"
Entre los grupos de la oposición, la portavoz de Compromís, Papi Robles, ha subrayado que "los únicos okupas son Carlos Mazón en la Generalitat y los concejales tránsfugas en el gobierno de Catalá", en alusión a los exediles de Vox que han pasado a ser no adscritos.
"En el PP están completamente ahogados por Vox. Abascal está dirigiendo los gobiernos, tanto de la Generalitat como del Ayuntamiento de València, y está marcando una línea argumental que nada tiene que ver con las necesidades que tenemos en València. Las personas que vivimos aquí lo que tenemos es un problema para acceder a la vivienda, y ella lo que hace es eliminar la oficina de acceso a la vivienda y, en cambio, anunciar esta auténtica barbaridad que está dirigida por Abascal", ha aseverado en declaraciones a los medios.
Para la portavoz municipal de Compromís, esto demuestra que Catalá está "vendiendo los derechos y necesidades" de la ciudad a "la extrema derecha" a cambio de "sus votos y sus intereses".
"Generar ruido"
Desde el PSPV, Borja Sanjuán ha coincidido en que esta oficina supone una "barbaridad" para tapar los "escándalos más vergonzosos" en el gobierno local. "Como Catalá sabe que tiene un problema ahora mismo, porque concejales con los que está negociando están siendo investigados por corrupción, o sabe que está en minoría, o sabe que la gente no se traga su papel de víctima durante la dana, o sabe que no estuvo a la altura ese día, lo que intenta es generar ruido en asuntos que no tienen nada que ver con la realidad, que no importan absolutamente a ningún valenciano, para tratar de generar polémica y que hablemos de las cosas que ella quiere que hablemos", ha argumentado.
El portavoz socialista ha indicado que es una estrategia de "desviar la atención" que también sigue el 'president' de la Generalitat, pero ha augurado que esta oficina no servirá "absolutamente nada" para "la táctica de Catalá porque el foco está donde esta: que ahora mismo tiene minoría de apoyos en su gobierno y que si quiere conseguir la mayoría lo tiene que hacer con una persona que está investigada por corrupción".
"Y además, todo el mundo somos conscientes en esta ciudad de que el 29 de octubre Mazón fue un irresponsable, un impresentable, pero María José Catalá tampoco estuvo donde tocaba", ha recalcado en alusión a la dana que arrasó la provincia de Valencia y provocó 228 fallecidos.