VALÈNCIA. (EP). La ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Magdalena Valerio, ha destacado la "plena sintonía y total conexión" del Gobierno en funciones con la Generalitat Valenciana en la lucha contra la economía sumergida, un problema de "insolidaridad y competencia desleal contra las empresas que cumplen".
En esa "complicidad" entre ambas administraciones ha coincidido el 'president', Ximo Puig, por lo que ha confiado en que la investidura del presidente del Gobierno en funciones y candidato socialista a la reelección, Pedro Sánchez, permita "caminar juntos" otros cuatro años en ese objetivo común.
Así lo han afirmado este miércoles en declaraciones a los medios tras mantener un breve encuentro en el Palau de la Generalitat, antes de participar los dos en la apertura del XXIII Congreso Español de Sociología en la Universitat de València (UV).
Valerio ha advertido que los retos laborales del futuro ya están en el presente y ha puesto en valor la cooperación con el Gobierno valenciano para afrontarlos, "con su presidente a la cabeza en este año y pico" de legislatura de Sánchez, a la espera del debate de investidura para su reelección.
Entre estos problemas ha resaltado especialmente la lucha contra la economía sumergida y ha apuntado como 'receta' esencial el diálogo social con todos los agentes económicos, en coordinación con las comunidades autónomas.
Más allá, en el conjunto del mercado laboral, ha llamado a "velar por un empleo digno, decente, estable, bien retribuido y seguro mediante la prevención de riesgos laborales", con la meta de que "ningún trabajador se juegue la vida y la salud".
La titular de Trabajo ha vuelto a mostrarse "escasamente triunfalista" con la bajada del paro en España durante junio --en 63.805 personas (-2,07%), el menor descenso en este mes desde 2009--, si bien ha puesto en valor el "récord histórico" de afiliados a la Seguridad Social --19,5 millones tras ganar 75.584 ocupados--.
Ha insistido en que "sigue preocupando mucho la calidad del empleo" y ha coincidido con Puig en que "todas las personas que quieran trabajar deben encontrar un empleo digno que les procure una independencia vital".
Para conseguirlo, ha destacado la apuesta del Gobierno por la formación para que los parados de larga duración se puedan incorporar al mercado laboral, con dos planes para incentivar el empleo joven y la contratación de desempleados que llevan tiempo sin trabajar.
Otra de las iniciativas del Ministerio es la orientación personalizada mediante 3.000 trabajadores dependientes de las comunidades autónomas. Estos orientadores harán que "cada parado tenga alguien de referencia a quien dirigirse", en contacto con el ámbito educativo, universitario, servicios sociales, ayuntamientos y "sobre todo con las empresas" para ver sus necesidades.
En este contexto, Valerio ha sumado la dificultad de que haya puestos que no se pueden cubrir porque no encuentran personas que los puedan desempeñar, como el sector de la construcción donde "faltan personas cualificadas". Ha instado a hacer un esfuerzo para que "nadie se quede en el camino" y ha prometido mantener la línea de cooperación con la Generalitat.
En la misma línea, Puig ha agradecido la "complicidad" del Ejecutivo durante estos meses, pues considera que tras el cambio de gobierno "afortunadamente hubo un cambio de actitud muy claro" que ha llevado a trabajar desde una misma visión. Ha llamado a "atajar los problemas gravísimos del mercado como la economía sumergida o las formas de pseudoesclavitud en ámbitos como el agrario".
Y ha manifestado su confianza en que esta relación "se pueda incrementar mucho más a partir de ese pleno de investidura" del 22 y 23 de julio, con el objetivo de que "haya un nuevo gobierno de Pedro Sánchez para caminar juntos otros cuatro años". Se ha dirigido a la ministra al acabar para agradecer su "actitud siempre valiente".