VALENCIA (VP/EFE). El conseller de Hacienda de la Generalitat valenciana, Vicent Soler, dijo este lunes, en referencia a la diferencia de impuestos entre su comunidad y la de Madrid -cuatro puntos menos en Transmisiones y sin impuesto sobre Patrimonio-, que "Madrid es una trampa", ya que "con los ingresos propios que tiene puede permitirse el lujo de bajar impuestos o incluso no cobrarlos".
Según Soler, "eso es jugar sucio por parte de la Comunidad de Madrid, muy sucio, y algún día algún gobierno tendrá que abordar eso". Tras recordar que Madrid se beneficia de ser la capital del Estado, lo que supone mayores ingresos en IRPF -el 50% de la recaudación es para las comunidades- y de IVA, el conseller afirmó: "Lucharé para que eso no continúe".
Soler realizó estas manifestaciones en el turno de preguntas tras pronunciar la conferencia titulada "Financiación y Modelo Económico de la Comunitat Valenciana", en un desayuno informativo de Fórum Europa. Tribuna Mediterránea. En él, reivindicó la necesidad de un sistema de financiación "constitucional y justo" que permita una financiación igualitaria de los servicios básicos.
Según dijo, el actual sistema de financiación autonómica "es injusto porque no se ajusta al principio de equidad, ni al de suficiencia ni al de solidaridad, principios básicos de la Constitución".
El conseller denunció que la Comunitat ha pagado al Estado más de 6.500 millones de Fondo de Suficiencia desde 2010 pese ser una autonomía infrafinanciada, tener "la tasa más baja de cobertura" de los servicios públicos fundamentales y gastar "mucho menos" que la medida. "Es un fondo de insuficiencia",
Añadió que ocurra lo que ocurra con la conformación del próximo Gobierno central, el cambio de modelo de financiación "es insoslayable", incluso en el caso de que hubiera "una cierta continuidad de los que están actualmente gobernando", algo que ve "improbable".
Soler defendió la reclamación hecha por los presidentes de la Generalitat, Ximo Puig, y la Junta andaluza, Susana Díaz, en relación a la condonación de la devolución del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) y ha asegurado que se trata de una "reivindicación de mínimos".