ALICANTE. La Generalitat redactará un decreto ley para definir qué es exactamente una instalación 'de interés estratégico', para completar el cambio en la ley del suelo que pretendía agilizar la tramitación de plantas fotovoltaicas y que, tal como publicó Alicante Plaza el sábado, ha provocado el efecto contrario. Así lo anunció este martes la consellera de Transición Ecológica, Mireia Mollà, en un encuentro con la asociación valenciana de productores de energía, Avaesen.
Como ha contado este periódico, el Consell modificó la Lotup en 2019 para dar más autonomía a los ayuntamientos y que pudieran aprobar la licencia de obra para plantas solares con un simple informe de la conselleria de Mollà, que se concedía además por silencio positivo en tres meses. Una medida que pretendía potenciar la instalación de energías renovables en la Comunitat y que, sin embargo, tras una nueva modificación en 2020, ha terminado bloqueando el sector, al exigir ahora informes de tres departamentos autonómicos que respalden el 'interés estratégico' de dicha planta.
La citada modificación, en lugar de dejar al criterio del Ayuntamiento, previo informe de Transición Ecológica, la concesión de la licencia, exige que el proyecto demuestre dicho interés a ojos del Consell. El problema es que, hasta ahora, no se ha establecido cómo demostrarlo, lo que en la práctica ha provocado que no se apruebe un solo proyecto en lo que va de año, como denuncian los pequeños promotores de plantas fotovoltaicas. Ahora, casi seis meses después de que el nuevo cambio en la Lotup haya entrado en vigor, la consellera ha anunciado que "el próximo paso" es redactar el citado decreto ley.
Según explicó Mollà a los empresarios del sector de las renovables, el citado decreto ley que va a redactarse ahora servirá para "definir los criterios que debe reunir un proyecto de interés estratégico". El decreto se elaborará con las aportaciones de la propia Conselleria de Medio Ambiente, junto con las de Economía Sostenible y Política Territorial, según explicó la consellera. "Una fórmula que se unirá a la de las Comunidades Energéticas Locales y que convierte a la Generalitat en la primera administración que plantea regular por ley este tipo de figuras", según destacó.
El anuncio de Mollà se produjo después de que el presidente de Avaesen, Marcos Lacruz, se interesase en el transcurso de la reunión por los cambios normativos que ha emprendido el Consell en el último año para agilizar la instalación de infraestructuras de energía renovable, y alinearse con los procesos de otros territorios colindantes, como la citada reforma de la Lotup y la enmienda a la Ley de Acompañamiento que entró en vigor el pasado 1 de enero.
Mollà defendió que su departamento impulsa "una flexibilización de los trámites para el autoconsumo energético y la instalación de energía eólica y solar fotovoltaica", para cumplir con los objetivos de origen renovable del 70% de energía eléctrica en 2030 y neutralidad en 2050, en línea con los fijados por la Unión Europea. En la reunión, Mollà trasladó a Avaesen los detalles en materia de energía que incluye el borrador de la nueva Ley Valenciana de Cambio Climático y Transición Ecológica.
El documento, que destaca la energía como uno de sus ejes para alcanzar la transición ecológica, defiende la reserva de suelo para instalación de renovables en los nuevos planes generales de ordenación urbana. Asimismo, la Conselleria ha elaborado ya un mapa de zonas de desarrollo de energías limpias, que excluye los espacios reconocidos con figuras de protección medioambiental, y sobre el que Economía Sostenible y Política Territorial tendrán que añadir sus respectivas capas. "La Comunitat Valenciana es una fuente de oportunidad en materia de energía limpia y democrática [...] y contamos con un Plan Director de Energía que plantea la instalación de renovables en 12.000 Ha de nuestro territorio".