El comité de empresa tilda de "tomadura de pelo" el punto de partida de la mercantil y le insta a presentar una "propuesta mejorada" en la reunión del próximo jueves
VALENCIA. Lladró tensa la cuerda -y de qué manera- en la negociación del ERE del grupo empresarial. En su primera propuesta al comité de empresa tras conocer la cantidad que aportará el Ministerio de Empleo para amortiguar los efectos del proceso -1,8 millones de euros- la multinacional de la porcelana se desmarcó este lunes con una dura propuesta para la plantilla: reducir la jornada laboral a los trabajadores que se queden en la empresa.
Así consta en un comunicado interno con el que el Comité de Empresa informó a los empleados del contenido de la reunión. En el documento los representantes de los trabajadores tildan la propuesta de la mercantil de "tomadura de pelo" y le instan a presentar una "propuesta mejorada" en la próxima reunión, que tendrá lugar el próximo jueves.
Según detalla el comunicado, que no especifica el número de salidas que tendrían lugar en el grupo, la intención de la firma es que los empleados que permanezcan en Lladró tras el ERE que se negocia lo hagan en el marco de un nuevo Expediente de Regulación Temporal de Empleo (Erte), una fórmula que Lladró ya aplicó en 2014 y 2015 a la totalidad de la plantilla para evitar acometer despidos.
En la práctica, pese a que evita salidas, esta herramienta ha traído graves consecuencias laborales a la plantilla de Lladró, cuyos trabajadores llegan a este nuevo ajuste con poco paro fruto de la reducción de jornada a la que, de nuevo, el grupo pretende someterlos. De hecho, el Ministerio de Empleo va a subvencionar el nuevo proceso de ajuste para subsanar, ex profeso, el daño creado con el Erte.
La intención del comité de empresa es que el proceso de ajuste se ciña a las prejubilaciones que puedan realizarse en el grupo empresarial. Según consta en el citado escrito distribuido por el comité, estas serían de entre el 60% y el 65%. A la espera de nuevas propuestas de salidas, sigue sobre la mesa la primera que lanzó el Grupo Lladró, que elevaba los despidos a 292 personas, el 42% del total.
Como informó este diario, el mayor número de salidas previstas por la empresa se concentrarían en Porcelanas Lladró, con un total de 193. Se trata de la empresa que aglutina el grueso de la fabricación de las figuras de porcelana y en la que existe un mayor número de trabajadores que podrían acogerse a prejubilaciones.
La también fabricante Arte y Porcelanas, que elabora la línea Nao, sería la segunda en padecer más salidas según la propuesta inicial. La mercantil, que cuenta con una plantilla más joven, perdería 44 empleados.
Otra mercantil que sufriría una salida masiva es la sociedad Diseños Artísticos e Industriales (Daisa). La cifra propuesta es de 36 trabajadores, con la particularidad de que se trata de una de las enseñas que aglutina más talento del grupo -diseñadores y responsables del área creativa de la marca-.
Por último, la dirección de Lladró propone 19 salidas en Lladró Comercial, la sociedad que capta el negocio y abre mercado en el exterior. Su plantilla está compuesta por 143 trabajadores.