ALICANTE (EFE). Los investigadores policiales que llevan el caso del asesinato de la viuda del expresidente de Caja Mediterráneo (CAM) Vicente Sala aguardan a los resultados del estudio de los restos biológicos hallados en la mano de la víctima, que podrían corresponder a un hombre.
Fuentes conocedoras de la investigación han señalado hoy a Efe que las muestras han sido enviadas a los laboratorios especializados de Madrid para cotejarlas con otras, entre ellas las del único detenido y enviado a prisión provisional sin fianza como presunto autor del crimen, Miguel López, yerno de la fallecida, María del Carmen Martínez.
Los restos biológicos encontrados en una mano de la fallecida podrían corresponder al autor de los disparos o no, puesto que podrían ser de los empleados del concesionario de automóviles donde fue tiroteada que acudieron a socorrerla en un primer momento o, incluso, del personal sanitario que la atendió en el mismo lugar.
Las mismas fuentes han indicado a Efe que no se prevén más detenciones por el momento.
Por otra parte, el delegado del Gobierno en la Comunitat, Juan Carlos Moragues, ha realizado hoy una visita a una cala de El Campello, la de Lanuza, para seguir las obras de rehabilitación tras los daños de los últimos temporales, y ha sido preguntado por los periodistas por mismo este caso.
Moragues ha felicitado a la Policía Nacional por la "celeridad y eficiencia" en resolver el crimen ya que, tras un trabajo que ha calificado de "arduo y minucioso", ha conseguido la detención del presunto autor en "apenas" dos meses.
Ha insistido en que "ahora le toca hablar a la Justicia" y ha evitado opinar sobre las declaraciones del letrado del único detenido, quien consideró que se había arrestado y enviado a la cárcel a su defendido sin pruebas suficientes, y se ha limitado a señalar que "es la opinión del abogado de una de las partes".
El juez de Alicante José Luis Lafuente, que lleva la instrucción, acordó ayer que la causa siga el procedimiento de jurado popular, al entender que las pesquisas efectuadas son suficientes para transformar las diligencias previas en una causa sometida al dictamen de un tribunal ciudadano.
Martínez falleció el pasado 9 de diciembre al recibir dos disparos a quemarropa en la cabeza cuando estaba en el interior de su vehículo, un todoterreno Porsche Cayenne que había ido a recoger al concesionario de automóviles regentado por López.
La Policía no ha hallado por el momento evidencias biológicas que incriminen a su yerno (marido de la hija menor de la víctima) ni tampoco el arma homicida, posiblemente una pistola antigua en la que se habría introducido munición manipulada con menos pólvora para amortiguar el ruido de las detonaciones.
Pese a que se declaró inocente tanto ante la Policía como con el juez, éste último decidió enviarle a prisión como presunto autor del asesinato.
A López, que tiene licencia de armas y que es aficionado al tiro olímpico, se le decomisaron varias armas largas y cortas aunque, en principio, todas relacionadas con su práctica deportiva.