Vicente Sala y su esposa, María Dolores Sánchez, en los juzgados de Alicante. Foto: RAFA MOLINAALICANTE. Nuevo movimiento táctico en el entramado empresarial de la familia Sala Martínez, golpeada duramente en diciembre pasado por la muerte violenta de la matriarca, Carmen Martínez, y la detención en febrero de su yerno Miguel López como presunto autor del crimen. Vicente Sala junior, al frente del imperio empresarial que construyeron sus padres y enfrentado a sus tres hermanas, ha designado a su esposa y su tía para acompañarle en la gestión de la sociedad Marlo Capital S.L., creada por su madre y él mismo tres meses antes del crimen, con la idea de que se convirtiera en la sociedad holding que tomase el control del resto del entramado.
Según publica el Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme) de Alicante este miércoles, Vicente Sala, administrador único de Marlo Capital S.L. desde la semana pasada (tal como desveló el sábado Alicante Plaza), ha designado a Antonia Martínez López, la hermana de su madre, y a María Dolores Sánchez, su esposa, como apoderadas solidarias de la sociedad creada por su madre. Las dos mujeres, alineadas con el primogénito en la guerra fría empresarial que mantiene con sus hermanas, ocupan así de forma solidaria el cargo que ostentó en su día el propio Vicente Sala junior, cuando la administradora única de Marlo era su madre.
Como ha venido contando este diario, madre e hijo crearon Marlo Capital a espaldas de sus hermanas el pasado septiembre, justo tras la crisis en el consejo de administración de Samar Internacional, la sociedad matriz del holding. En ese consejo, las hermanas depusieron al hijo varón para tomar el control de Samar y de la Compañía Española de Resinas (la mercantil que está al frente de la rama patrimonial del grupo). No obstante, su madre hizo valer la 'acción de oro' para anular la decisión del consejo, lo disolvió y nombró a su primogénito como administrador único de Samar. Para sí misma se reservó la Compañía Española de Resinas.
La estrategia para apartar a las hermanas, aunque socias (suman el 60% del capital del grupo), del control del entramado, pasaba no obstante por situar a Marlo Capital, con Carmen Martínez como administradora única, al frente de la rama patrimonial, que gestiona las numerosas propiedades de la familia y de sus empresas. De hecho, Marlo es ya la administradora única de la Compañía Española de Resinas. A su vez, Vicente Sala junior quedaba como apoderado de esta sociedad, de forma que podía actuar en nombre de su madre. En cambio, ninguna de las hermanas participa en el capital de esta mercantil, como sí sucede en el resto. La muerte violenta de la matriarca, viuda del expresidente de la extinta Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) Vicente Sala Bello, ha dejado a su hijo como único accionista y administrador de Marlo, tal como ha contado este diario.
Ahora, Vicente Sala junior sigue en Marlo la misma estrategia que con el resto de empresas que dirige al margen de sus hermanas. Al pasar a ocupar el cargo de administrador único por la muerte de su madre, ha nombrado a sus dos mujeres de confianza, su propia esposa y la hermana (y confidente) de su madre, para que lo acompañen en la gestión. Antonia Martínez (que además posee un porcentaje testimonial del capital de Samar, al cedérselo en su día su hermana) y María Dolores Sánchez ya son apoderadas de Vicente Sala Martínez además en Samar Internacional S.L., SM Resinas Logística S.L. y en Samarlen S.L. En estas tres empresas, el cargo de apoderado que ocuparon de forma solidaria ambas mujeres lo había dejado vacante, precisamente, la víctima.
