VALÈNCIA. Un nuevo hotel de dos estrellas y 45 habitaciones construido en la calle Félix Pizcueta de València, en pleno Ensanche de la ciudad, se erigió sin la correspondiente licencia y mediante una declaración responsable de los promotores que no amparaba las actuaciones realizadas. Es lo que ha constatado ya el Ayuntamiento de València en una reciente resolución, que impide llevar a cabo nuevas obras en el edificio -si bien estas ya estarían prácticamente finalizadas-.
Así consta en la reciente resolución de la concejalía de Actividades, dirigida por Lucía Beamud, que declara "la ineficacia de la declaración responsable de obras" presentada por la empresa promotora, el fondo Opportunity Valencia Real State, y con la cual ha llevado a cabo las actuaciones sin la licencia correspondiente para una intervención de este tipo, como publicó Valencia Plaza.
Así, la resolución emitida el pasado 15 de noviembre, suscrita por dos técnicos del área confirma la "inadecuación" de la figura de la declaración responsable que ya habían apuntado otros informes técnicos hace más de un año -julio de 2021-. La declaración responsable está contemplada en la normativa y permite iniciar las obras sin necesidad de licencia, pero su uso está restringido a determinados supuestos. Y este caso no entraba en esos supuestos.
Los promotores presentaron la declaración en mayo de 2021 con el visto de una entidad colaboradora, pero apenas dos meses después, los técnicos municipales de la Sección Urbanística del consistorio, emitieron un informe explicitando que las obras previstas no se podían hacer mediante declaración responsable, sino que requerían una licencia de obras -cuyo trámite administrativo es más largo-, tal como consta en el expediente administrativo.
Con todo, el consistorio notificó este informe mucho tiempo después, en abril de 2022, nueve meses después, cuando las obras ya estaban en un estado muy avanzado. A esto se acogen los promotores para alegar que, durante ese período, al no haber sido notificados de ninguna deficiencia, y tras abonar el impuesto de obras, iniciaron las actuaciones en septiembre de 2021 "al amparo de lo que se creía un título habilitante válido".
El incumplimiento se destapó tras las denuncias de un letrado, Martín de Oleza, quien acusa al Ayuntamiento por no notificar el informe negativo "hasta más de nueve meses después ni ordenó su inmediata paralización, permitiendo así que se consolidara una obra ilegal en edificio protegido". Con todo, apenas un mes después de notificarse el informe desfavorable a la declaración responsable, ya en mayo de 2022, el promotor procedió a solicitar de manera correcta la licencia de obras, que todavía no se ha concedido.
Así, la resolución de la concejalía de Actividades indica que "el propio interesado -la empresa- ha aceptado tácitamente la inadecuación de la declaración responsable presentada frente al procedimiento realmente aplicable" y declara la ineficacia de la declaración inicial, "manifestando la imposibilidad de realizar obra alguna en atención a la citada declaración y en tanto no se resuelva la solicitud de la Licencia de intervención".
Todo ello, subraya la resolución en ese sentido, "sin perjuicio de las responsabilidades penales, civiles o administrativas a que hubiera lugar por la obras ejecutadas y en atención a la inadecuación de la declaración responsable".