MADRID, (EFECOM). El secretario general de UGT, Josep Maria Álvarez, ha pedido hoy a la mayoría de izquierdas que hay en el Parlamento "que se deje de tonterías y se ponga a trabajar" y le ha exigido que empiece derogando la reforma laboral, dejándose de eufemismos y restituyendo las leyes y los derechos perdidos.
En su primera intervención como secretario general en la clausura del 42 Congreso Confederal, Álvarez ha explicado que "eufemismos aparte" si los sindicatos van a una negociación con la patronal con la actual legislación, "no vamos a ser capaces de levantar cabeza". Álvarez ha insistido en que actualmente no se dan las condiciones de equilibrio que permitan negociar con resultados positivos.
"No es un capricho pedir derogar la reforma laboral. Lo podemos hacer", ha asegurado, al tiempo que ha acusado a la patronal de haber olvidado los compromisos adquiridos con los sindicatos en cuanto llego el Gobierno del PP. Álvarez ha apelado a esa mayoría para que hable de este asunto pero también de otras políticas sociales que se han visto mermadas y que importan mucho a los trabajadores.
En su intervención, el recién elegido secretario general ha asegurado que la nueva Ejecutiva será fiel a todos los compromisos adquiridos y ha asegurado que "no hay ruptura, hay continuidad" y este Congreso debe ser "un punto y aparte para profundizar" en la estructura interna del sindicato.
Álvarez que ha agradecido el trabajo a la Ejecutiva saliente, y en particular a Cándido Méndez, ha subrayado como primer compromiso la participación de los afiliados. "No se puede continuar con el actual sistema", ha dicho Álvarez, quien ha comentado que una de las ideas que plantea es que cualquier acuerdo confederal "importante y transcendente" se someta al referendo de los delegados. Ha insistido en avanzar en la participación y ha apostado por movilizar a los trabajadores, con debates públicos y transparentes.
Álvarez también ha denunciado una campaña para criminalizar el sindicalismo pero no sólo en España, también en muchos países de la Unión Europea. "Estoy hasta las narices -ha dicho- que se quiera aplicar a España lo peor de las legislaciones europeas, y esto se soluciona con las ideas claras".
Álvarez también ha denunciado una campaña para criminalizar el sindicalismo pero no sólo en España, también en muchos países de la Unión Europea. "Estoy hasta las narices -ha dicho- que se quiera aplicar a España lo peor de las legislaciones europeas, y esto se soluciona con las ideas claras".
Álvarez ha abogado por una organización transparente que dé a conocer todo aquello que hace, por qué lo hace y que dé explicaciones de cómo usa los recursos públicos. Y esto permitirá que nadie dude de la transparencia del sindicato, ha dicho. Además, ha propuesto para la Ejecutiva Federal y las tres federaciones estatales "un plan de ahorro de reducción de la cabeza del sindicato" para que los recursos lleguen a los servicios a los afiliados.
El nuevo líder de UGT ha añadido que reducir las federaciones de seis a tres no supone centralizar si no todo lo contrario y ha apostado por que los sectores sean los instrumentos de acción sindical. Además ha propuesto un plan estratégico por la industria que permita saber dónde se van a crear los puestos de trabajo y ha añadido que "la economía del viento no es presente ni futuro".