VALÈNCIA. (EFE) El lado más íntimo y personal del pintor valenciano Rafael Armengol se muestra en una nueva exposición en València de 88 retratos de amigos y familiares, su gente más cercana, una técnica que siempre ha sido un reto para él porque requiere "la máxima perfección".
El Museu Valencià de la Il·lustració i de la Modernitat (MuVIM) expone Cara a cara. Rafael Armengol (Retrats), en la que se ve cada una de las etapas y los descubrimientos técnicos del artista desde 1958 hasta 2024, y dibuja al pintor desde su lado artístico, pero también desde su parte humana, agrupando las obras por afinidad, vínculos familiares o amistades, sin seguir un orden cronológico.
La muestra ilustra la vida íntima y personal de Armengol con una serie de pinturas que a lo largo de las décadas ha dedicado a su pareja, Marisa, y que dan forma a una historia llena de carga emocional, y también plasma su amistad con Vicent Andrés Estellés, a quién dedicó una parte importante de su producción. En ambos casos las obras van acompañadas de textos literarios que marcan este punto de emoción y familiaridad, según la Diputación de Valencia.
La mayoría son obras realizadas desde la confianza para amigos y familiares, donde consigue trasladar al lienzo de manera delicada las fisionomías y caracteres de los retratos, siempre vistos con aprecio y respeto, donde se plasma el esfuerzo y la experimentación que caracterizan al pintor.
Según el propio Armengol, “esta muestra es una deuda que tenía con mi público para que conozcan la realidad de toda mi obra. El retrato siempre ha sido un reto para mí, porque requiere alcanzar la máxima perfección, cada elemento tiene que estar en su punto, y hasta que no consigo dialogar con el retrato no lo doy por finalizado”.

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- Foto: Abulaila / Diputació de València
A lo largo de su carrera, la obra de Rafa Armengol se fundamenta, por un lado, en una investigación constante sobre la percepción del color y su reproducción en los medios de comunicación de masas y, por otro, en un conocimiento profundo de la historia del arte, donde toma los referentes que reinterpreta.
Pero además de esa obra más conocida, con series icónicas como La matanza del cerdo o Torre de Babel, hay una producción que ha pasado prácticamente desapercibida por su vocación íntima, y que esta exposición contempla y acerca al público.
El comisario de la exposición, Amador Griñó, ha manifestado que gracias a la muestra se puede ver toda la evolución pictórica de Armengol, que también es una parte muy relevante de la evolución de la pintura contemporánea valenciana.
Por su parte, el director del MuVIM, Rafael Company, ha subrayado la contribución que hace el museo a que los jóvenes artistas conozcan la figura de Rafa Armengol.
El diputado de Cultura de la Diputación de Valencia, Paco Teruel, ha dicho que se trata de un artista único y con una consolidada trayectoria que ha dado lugar a "una obra especial y reconocible", que le valió en 2004 el Premio Alfons Roig.
La Diputación conserva obras de las primeras épocas del pintor, “un artista imprescindible que ha expuesto en innumerables museos y galerías de arte y que tiene ya un lugar destacado en la historia del arte”, ha apuntado.