VALENCIA. Banco Sabadell (SAB) truncó el viernes una negativa racha bajista de cinco sesiones cerrando al dictado de los 'números rojos' en bolsa, que le restaron prácticamente un 9% de su capitalización en tan corto espacio de tiempo. La cotización del banco presidido por Josep Oliu, que se anotó una suave subida del 0,39% -avance al fin y al cabo-, cerró en los 1,561 euros, lo que equivale a un valor en el parqué de 8.689 millones de euros.
Una capitalización que la ha llevado a situarse en la parte medio/baja del Ibex 35 a caballo entre ACS (8.807 millones de euros) y Grifols (7.764 millones); además de dejarse en el parqué en lo que va de año un 4,8% en un ejercicio donde "la banca está siendo tremendamente castigada por todo lo que se le viene encima como posibles provisiones por las cláusulas suelo, unos bajos tipos de interés que están impactando sobre sus cuentas y la desconfianza inversora sobre el sector", advierten desde una mesa de intermediación bursátil consultada por este diario.
Y no les falta razón porque la práctica totalidad del sector transita en bolsa este año por terreno negativo salvo contadas excepciones, pese a ofrecer precios atractivos e inferiores a su valor en libros. De ahí que a la mínima que puedan y, aprovechando las llamadas 'ventanas temporales", los consejeros opten por comprar. Ahí está el caso de José Ramón Martínez Sufrategui, que el pasado 29 de abril se hizo con 50.000 'sabadeles' -como se le conoce en la jerga bursátil al banco vallesano- a un precio de 1,70 euros por título.
Este consejero perteneciente a una familia vasca vinculada a la construcción y que eran accionistas del Banco Guipuzcoano -adquirido por el Sabadell en 2010- ya adquirió 70.000 'sabadeles' más el pasado 8 de febrero a 1,58 euros por acción. Actualmente, y según el registro oficial de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), ostenta el 0,041% del capital del SAB.
Las últimas compras realizadas por este arquitecto riojano, nombrado consejero independiente en septiembre de 2010 y reelegido en mayo del pasado año, se sitúan muy por debajo de los 1,90 euros del precio objetivo bajo recomendación de 'compra'que le colgaron recientemente a los títulos del Sabadell los analistas del gigante suizo UBS.
Pese al mal tono bursátil del SAB en bolsa este año, sus accionistas volvieron a darle un voto de confianza, dado que casi el 80% de ellos optaron por recibir nuevas acciones en el marco de la ampliación de capital liberada anunciada por el banco para ejecutar su programa de retribución flexible al accionista o 'scrip dividend'.