El ‘yonki’ del dinero asegura que fue el expresidente quien remitió a Rus a Campos y éste a Caturla
VALÈNCIA. El exgerente de Imelsa, Marcos Benavent, ha levantado la alfombra de la porquería del PP valenciano en su declaración ante el magistrado del caso Taula dentro de la pieza de Ciegsa, que es la que investiga las presuntas mordidas en la empresa pública de construcción de colegios que, supuestamente, sirvieron para financiar al PP provincial del expresidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus.
En esta declaración, tal y como ha adelantado Valencia Plaza, se ha acusado al diputado autonómico y miembro de la ejecutiva nacional del PP, Vicente Betoret, de recibir sobres con dinero negro. Pero más allá de eso, ha habido una parte de la declaración que abre las puertas a nuevas imputaciones del expresidente de la Generalitat, Francisco Camps.
Ni más ni menos, preguntado por cómo le encargó Rus que cobrara comisiones de Ciegsa para financiar el partido, el ‘yonki’ del dinero afirmó: “Rus habló con el presidente Camps, éste le remitió a Víctor Campos (ex vicepresidente), y éste le dijo que la persona indicada para suplir esas necesidades económicas era Máximo Caturla (consejero delegado de Ciegsa). Este hecho era así porque antes de que Rus consiguiera la presidencia de la Diputación, “la única financiación ilegal del partido, provincial, era Ciegsa”.
Estas afirmaciones apuntalan lo dicho por el ex secretario general del PPCV, Ricardo Costa, dentro del juicio por la financiación irregular del partido, ya que en su declaración en la Audiencia Nacional señaló, tanto a Camps como cerebro como a Campos como la persona que se encargaba de hablar con los empresarios para conseguir el dinero para las campañas electorales. Unas afirmaciones que Campos y Camps negaron en sus declaraciones como testigos en el juicio que se celebra en Madrid.
Sobre el modo de cobro, Benavent afirmó que “cuando alguien le entregaba un sobre, no se daban explicaciones, solo si estaba todo o faltaba, y si faltaba cuándo se completaría”. En cuanto a las empresas que ‘ayudaron’ a financiar al PP provincial, el ‘yonki’ explicó que él solo cobró en efectivo de dos pero que había más. Dichas empresas eran Cleop y Construcciones Luján.
Pero también explicó, preguntado sobre si Caturla cobraba de otras empresas adjudicatarias, que no lo había visto, pero "era el funcionamiento normal", y suponía "que sí". Que le constaba que cobraba porque era "el funcionamiento normal que llevaba a cabo”. Añadió además que con el dinero entregado por Luján y Cleop "había suficiente para el funcionamiento del partido”, a la vez que explicó que parte de las mordidas, como por ejemplo una de 30.000 euros, “se quiso quedar 10.000 euros. Que esos 10.000 euros eran para que se los quedara Máximo. Que eso 10.000 euros no llegaban al partido”.
Sobre Construcciones Luján, el exgerente de Imelsa aseguró que quedaba en la sede de la empresa en la calle Jesús de València, y que era Javier Luján la persona que le daba los sobres, así como que era Máximo Caturla quien le decía que tenía que ir a la empresa y qué cantidad debía de cobrar.
Ya en un plano más íntimo, y sobre el hecho de recoger dinero negro, el ‘yonnki’ explicó que “en confianza”, entre él y Caturla, que hubo comentarios como “ve con cuidado”, “no vayas por la calle con mucho dinero”, “a ver dónde quedas” y algunas frases de ese calado.
Pero no solo se robaba del erario para financiar el partido o como recompensa, al parecer, los robos eran incluso internos. Marcos Benavent, preguntado por si él o Máximo Caturla ocultaron el importe real de lo percibido por las mordidas a Alfonso Rus afirmó: “Sí. Él lo hizo. Era él el que lo hacía, que hablaba con Máximo y decidían que cantidad se quedaban ellos, y que cantidad le entregaban a Alfonso”.