CALP. ElAyuntamiento de Calp ha presentado ya el recurso de alzada contra la resolución de la Conselleria de Agricultura, Ganadería y Pesca que otorga autorización para la ampliación de la piscifactoría ubicada en Calp en 45 jaulas flotantes, es decir la nueva dimensión es casi seis veces mayor que la preexistente.
La autorización supone una concesión de 550.000m2, en un rectángulo delimitado de 1.100x500m que consta de 45 jaulas flotantes de 25 metros de diámetro y 21,5 metros de profundidad, con capacidad para producir 3.000 Tm al año.
El recurso de alzada se articula en torno a cuatro puntos: que el Estudio de Impacto Ambiental de Consellería carece del estudio de alternativas viables exigido por ley y cuya ausencia pueden suponer la nulidad del procedimiento de autorización de la actividad. Por otro lado desde el Ayuntamiento se considera que la Declaración de Impacto Ambiental se resuelve fuera de plazo.
También se considera que no ha quedado acreditada la existencia de un Plan de Participación Pública de acuerdo con la Ley de ordenación del territorio, urbanismo y paisaje. Y finalmente no se considera suficientemente estudiado el impacto que produciría la instalación en la economía local, cifrándose éste en una perdida de unos 450 millones de euros.
Para respaldar el recurso el Ayuntamiento ha adjuntado dos informes: un informe medio ambiental realizado por la consultoría ambiental Geoinnova y un informe de impacto económico, emitido por el jefe del área de Promoción Turística y Económica del Ayuntamiento.
El informa de Geoinnova señala que en relación al Estudio de Impacto Ambiental el análisis de alternativas de ubicación debería haberse adecuado a la normativa de evaluación ambiental, haciendo un análisis multicriterio y comparando los efectos ambientales entre las distintas alternativas. También añade que no se valora la vulnerabilidad del proyecto respecto al cambio climático y que el presupuesto no contempla apartado específico de medidas preventivas, correctoras y/o compensatorias.
También se indica que se deberían haber evaluado los efectos e impactos para la fase de desmantelación del proyecto. Finalmente, el documento estima necesario e imprescindible la realización del “Estudio de la capacidad de carga del medio” para la Bahía de Calp.
En cuanto al informe económico, se considera que existen motivos razonados más que suficientes para justificar que Calp, uno de los principales destinos turísticos de la Comunitat Valenciana, no es el lugar adecuado para implantar esta actividad. El documento indica que las “playas, el paisaje y los atractivos que ofrece la náutica en el municipio, son motores fundamentales de la competitividad turística del municipio y estarían potencialmente afectados por la instalación de la granja marina proyectada frente al Morro de Toix”.
También se añade que en la “medida en que la implantación de la granja marina pudiera amenazar la calidad de las playas de Calp y su paisaje, pondría en riesgo el principal atractivo turístico del municipio. Y nada garantiza en la documentación del expediente de autorización que estos impactos no puedan producirse”. El informe pone en duda la sosteniblidad ambiental, social y económica de la actividad de la piscifactoría y establece que el impacto de la instalación podría producir pérdidas millonarias en la economía local.