VALENCIA. Sociedad de Gestión Cámara de Valencia SL. Ese es la denominación de la sociedad que la Cámara de Comercio de Valencia acaba de registrar para gestionar los servicios que presta a las empresas, una de sus vías de financiación tras la desaparición del conocido como recurso cameral permanente, el pago que las mercantiles con beneficios estaban a obligar a realizar a la institución cameral por pertenecer a ella.
La nueva filial, cuya inscripción se hizo pública en el registro mercantil de este martes, nace con un capital social de 3.000 euros y tiene como socio único a la Cámara Oficial de Comercio, Industria y Servicios de Valencia. El administrador único es el presidente de la Cámara, José Vicente Morata.
La creación de la sociedad, activa desde principios de marzo, responde al acuerdo aprobado por el pleno de la institución el pasado diciembre para cumplir con la nueva ley de cámaras, que obliga a la Cámara a segregar en una filial los servicios que presta en régimen privado. Con ello, "contribuye a la transparencia de la separación entre sus ámbitos público y privado", destaca la institución.
La Cámara de Valencia, que se define como corporación de derecho público tutelada por la administración, maneja recursos de origen público y privado. Su presupuesto para 2016 supera los 8,56 millones de euros. La nueva ley autonómica de cámaras prevé entre sus vías de financiación los ingresos ordinarios y extraordinarios obtenidos por los servicios prestados a empresas.
En la actualidad, la institución ya cobraba por servicios centrados en internacionalización, formación o emprendimiento, como por ejemplo el servicio de ventanilla única empresarial.
La nueva normativa autonómica también contempla la posibilidad de que las empresas puedan realizar pagos voluntarios a la institución a cambio de tener influencia en el pleno. De los 60 órganos que tendrá este órgano, doce vocales se reservan a las empresas que mayores aportaciones económicas realicen a la Cámara.
La otra gran vía de financiación son los recursos públicos, particularmente procedentes de encomiendas de gestión y las subvenciones para cubrir gastos de funcionamiento. Para este año, el Consell inyectará 560.000 euros en el Consejo de Cámaras de la Comunitat para cubrir los costes personal y funcionamiento de las cinco cámaras que lo integran: Alcoy, Alicante, Castellón, Orihuela y Valencia.