El vicepresidente segundo, Rubén Martínez Dalmau. Foto: EVA MÁÑEZVALÈNCIA. El pleno del Consell aprobará este viernes el último cese de la Conselleria de Vivienda y Arquitectura Bioclimática que dirige el vicepresidente segundo Rubén Martínez Dalmau. En este caso, se hará efectiva la salida de David Vegara como director general de Emergencia Habitacional, un puesto que pasó a ocupar hace apenas ocho meses y en el que le sustituirá Pura Peris, hasta ahora subdirectora de Gestión de la Entidad Valenciana de Vivienda y Suelo (EVha).
Con esta salida, la Conselleria que lidera Dalmau se convierte en una de las más inestables en este mandato. De hecho, desde hace 14 meses este departamento ha sufrido cuatro bajas de altos cargos y, en concreto, el puesto que ocupaba Vegara ha tenido tres inquilinos en apenas el primer año de la legislatura del Botànic II. Unas circunstancias que ponen de manifiesto que la citada conselleria es una cartera en la que a veces existen dificultades de adaptación o convivencia.
Ahora bien, esas dificultades siempre se han producido exclusivamente en 'territorio' de Podem, ya que de los ocho altos cargos que conforman Vivienda solo se han ejecutado ceses o dimisiones en aquellos que dependían directamente del vicepresidente segundo. Los dos cargos que ocupa el PSPV en esta cartera, sin embargo, se mantienen intactos desde que entraron en el Ejecutivo valenciano: es el caso de Nuria Matarredona, directora general de Innovación Ecológica, y la secretaria autonómica de Arquitectura Bioclimática, Laura Soto.
Por contra, de los seis nombramientos que realizó la formación morada al inicio de la legislatura, Dalmau ya ha hecho cambios en la mitad de ellos: en la Dirección General de Coordinación, en la DG de Eficiencia Energética y en la de Emergencia Habitacional. En este último, incluso, ha habido más de un relevo, lo que provoca por tanto que más del 50% de los nombramientos que llevan su han cesado o dimitido en apenas 14 meses.
Conviene apuntar, así, que Dalmau ya suma a sus espaldas cuatro relevos en el primer año como conseller, pero estos comenzaron a producirse exactamente en diciembre de 2019, por lo que apenas se han llevado a cabo en cuestión de medio curso político. Con estos mimbres, no son pocas las carteras del Gobierno valenciano en las que circulan desde hace semanas comentarios sobre los seísmos que se producen en el Palau Pineda y el "ruido" que ha generado en tan poco tiempo una única conselleria que nació de una dirección general.
Actualmente, Unides Podem ostenta los siguientes puestos en Vivienda: la subsecretaría que ocupa Blanca Jiménez Garrido; la Secretaría Autonómica de Vivienda y Función Social que ocupa César Jiménez; la Dirección General de Rehabilitación Urbana que gestiona Elena Azcárraga; la Dirección General de Coordinación Institucional de la Vicepresidencia Segunda que ejerce Adoración Guamán; la Dirección de Emergencia Habitacional que este viernes pasará a ocupar Pura Peris; y la Dirección General de Calidad, Rehabilitación y Eficiencia Energética que ostenta Alberto Rubio. De estos, tan solo tres cargos, Jiménez, Azcárraga y Jiménez Garrido se encuentran al frente de sus responsabilidades desde que empezó la legislatura. Los otros tres llegaron a sus puestos para suceder a sus predecesores después de que se desataran varias crisis internas en el seno de la Conselleria.
El caso de Rubio fue el más reciente: pasó a sustituir a Jaume Monfort, después de que éste fuera cesado el pasado 30 de julio por el pleno del Consell. Una salida sobre la que no se ofrecieron extensas explicaciones desde el Gobierno valenciano, pero que generó una profunda polémica en el seno de la formación morada. Desde un sector de Unides Podem acusaron al vicepresidente segundo de estar realizando una "purga" en la Conselleria y de nombrar y cesar a altos cargos de Podem sin contar con el partido para ello.
Asimismo, encajaron esta salida como "un ajuste de cuentas" tras las primarias que celebró Podem en la Comunitat Valenciana en las que Pilar Lima resultó elegida nueva Coordinadora general del partido. En este cónclave interno, Dalmau no respaldó a Lima, sino a la síndica en les Corts, Naiara Davó, y Monfort apoyó la tercera vía encabezada por Fernando Navarro, a quien también secundó la también ex directora general de Coordinación Àngela Ballester. Un punto de inflexión que al parecer despertó la desconfianza del entorno del vicepresidente tanto en Monfort como en Ballester. Esta segunda, fue destituida un mes antes que el ex concejal de Gata de Gorgos.
A estos dos cambios en la Conselleria de Vivienda, se suman otros dos más, en concreto en la DG de Emergencia Habitacional, que ha sufrido de media un relevo por cada cuatrimestre. Lorena Sanz fue el primer nombramiento que realizó Dalmau en este puesto y estuvo en él apenas seis meses de legislatura. Su salida no estuvo exenta de polémica porque se produjo después de varios desencuentros con el responsable del ramo. Finalmente, el que precipitó esta decisión fue la concentración semanas antes del cese que organizaron representantes de la Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH) ante el Palau de la Generalitat por las políticas puestas en marcha por el departamento de Vivienda y la baja ejecución presupuestaria en la partida de ayudas para el pago del alquiler en casos especiales.
Vegara, secretario general de Podem en Orihuela, sustituyó a Sanz en diciembre y hasta este viernes, que pasará a ser sustituido por Peris. En definitiva, tan solo tres nombramientos de seis que dependen directamente de Dalmau se han mantenido intactos, mientras en otros tres puestos ha habido cuatro relevos en un breve lapso de tiempo.
