VALÈNCIA. María José Català, la candidata del Partido Popular a la Alcaldía de València, acude a los comicios municipales del 26 de mayo con la aspiración de aglutinar el mayor número de apoyos en la derecha valenciana. Se presenta como adalid del sentido común. Es más, 'Sentido común' es el lema de su campaña. En valenciano suena mucho más cercano: trellat.
Este miércoles, en el Museo de la Seda, Català ha hecho público su programa electoral y su campaña para las próximas semanas. Los populares la han planteado contra los "caprichos, el desorden y las imposiciones" del actual equipo de gobierno, con Joan Ribó (Compromís) al frente y sus socios de ejecutivo, PSPV y Podemos. Según la candidata del PP, estos últimos cuatro años han estado plagados de "acciones sin sentido".
La candidata quiere tirar de simbolismo. No en vano, y como declaración de intenciones, ha incluido entre sus filas por ejemplo al presidente de Lo Rat Penat, Enric Esteve. La pasada semana, además, se hizo una fotografía de campaña con una silla transparente: pide más transparencia al Ayuntamiento. Dará el pistoletazo de salida a la campaña en un casal fallero y a continuación se trasladará a Reino de Valencia.
Icónico por el nombre, resalta Català, porque simboliza "la grandeza" de la ciudad y que el PP reivindica como único con "un proyecto autonomista, regionalista y que defiende sus señas de identidad", pero también porque representa "la falta de sentido común".
Allí, la concejalía de Movilidad Sostenible, dirigida por Giuseppe Grezzi (Compromís), ha puesto en marcha una actuación controvertida y muy debatida durante este mandato, abriendo un carril bici y dejando un sólo un carril para los automóviles y el transporte público. "Una actuación que dista mucho del sentido común, y un ejemplo de lo que no haremos nunca", insiste la candidata del PP. La gestión de Grezzi al frente de la movilidad, como se preveía, será una de las dianas de la actual oposición.
La campaña incluirá un acto central que consistirá en la práctica del 'tardeo', una fiesta vespertina, y un acto de final de campaña. Sin embargo, Català no ha querido adelantar sus emplazamientos si bien ha dicho que serán "lugares simbólicos". Además, el equipo de la candidata organizará meeting corners y speech corners, así como una campaña a pie de calle.
Como ya se había explicado días atrás, se ha abierto también un 'call center' para todos los afiliados. Hablando de afiliados, Català ha recordado que el PP es el partido "más fuerte" del cap i casal, y que "cuando el PP arranca, arranca fuerte".
Català ha afirmado que Ribó centrará su campaña, al igual que los presidentes en funciones Ximo Puig y Pedro Sánchez, en "agitar el miedo a la extrema derecha para conseguir los votos de la izquierda" porque "no tiene ni proyecto ni programa". Pero ella, preguntada por si marcará distancias con Vox, ha replicado que se centrará en hablar del PP y no va a "contribuir a hacer la campaña a nadie".
Por contra, se ha presentado como la alcaldesa que "gobernará para todos" con el programa electoral 'Ilusión por València' que reúne 700 medidas aglutinadas en 20 ejes. "Se trata de 20 ejes de acción que son 20 compromisos que ejecutaré en los 20 primeros meses de gobierno para alcanzar 2020 con los compromisos cumplidos".
Català ha señalado que su programa contempla una memoria económica de 65 millones anuales, a falta de ajustar inversiones estatales y de la Generalitat que exigirá, pero que es perfectamente ejecutable gracias a que, ha justificado, aumentará la capacidad recaudatoria no por impuestos a personas sino por el aumento de licencias y el cobro de tasas por la prestación de servicios como a las empresas de movilidad.
Así, será una legislatura orientada a ayudar a las personas porque las grandes inversiones "ya las hicimos y ahora toca utilizarlas". De este presupuesto, la mayor partida se la lleva el cheque escolar al que se destinará 35 millones al año para sufragar la gratuidad de la educación de 0 a 3 años tanto en la pública como en la privada y concertada.
La reducción del 10% del IBI supondrá 22 millones mientras que la bonificación en un 95% del impuesto de plusvalía para herencias y transmisiones de empresas se calcula en otros 12 millones. Esta reducción de impuestos se compensará con el aumento de recaudación por la agilización de licencias frente al colapso de 3.000 que ahora están paralizadas.
La gestión de Català se centrará de hacer una València "cómoda y sin atascos" gracias a un transporte público ágil, medidas para potenciar empleo y vivienda para jóvenes y servicios para mayores, fomentar la igualdad con oportunidades de la mujer y la integración de los discapacitados.
Además, aplicará un plan de choque para que destinar el 80% de la tasa de reposición anual a cubrir plazas de policías y bomberos y hacer una València segura, además de limpia, innovadora y transparente. La candidata popular quiere aumentar el 35% la subvención a los monumentos falleros y combinar el turismo low cost del aeropuerto de Manises con un turismo cultural.