Empleado en la planta de motores de Ford AlmussafesVALÈNCIA. El ERE temporal que estudia Ford Almussafes para la planta de motores -un Erte que afectaría a 300 personas, como reveló este martes Valencia Plaza- no cuenta con el apoyo de los sindicatos minoritarios de la factoría CCOO, Intersindical y CGT.
La medida fue propuesta por el sindicato mayoritario -UGT- para dar respuesta a la caída de la carga de trabajo por la pérdida del suministro a Jaguar-Land Rover. La organización considera que esta fórmula, acompañada de un suplemento salarial para los empleados, es la más indicada para mantener los puestos de trabajo en la factoría hasta recuperar el ritmo de trabajo con el encargo del nuevo motor Maverick en 2018. Pero CCOO, Intersindical y CGT discrepan.
CCOO la critica porque supondría, según afirman, el consumo de 180 días de desempleo que no serían restituidos; y porque la empresa "ni se compromete a que los empleados conserven el 100% de su salario ni garantiza que la medida suponga que se mantengan los empleos eventuales en la factoría". Por todo ello aboga por que el exceso de personal de motores "pase a ocupar puestos en la planta de vehículos" durante el valle productivo.
STM-Intersindical, en la misma línea, se posicionó contra el ERTE al asegurar que "los cientos de millones de euros que Ford Almussafes ganó en los dos últimos ejercicios publicados" permiten a la empresa mantener a la plantilla pese a la disminución temporal de la carga de trabajo. "Asumir estos 130 empleos durante lo que resta de año apenas supondría una muesca en esos multimillonarios resultados", afirman desde el sindicato.
Además la organización lo consideraría "un ejercicio de responsabilidad de la empresa para con la salud de la plantilla". "Ellos saben que estos ritmos son inaguantables por más tiempo y que, de seguir así, incidirán de forma dramática en nuestra salud y también incidirá en el futuro de la planta", afirman.
CGT, por su parte, subrayó la "contradicción" de que Ford Almussafes esté realizando jornadas de producción en sábados ante el incremento de la demanda mientras sostiene que tiene que reducir la plantilla de motores. "La solución debería pasar por reducir la carga de trabajo a los empleados, no por solicitar un ERTE", critican.
