Ciudadanos propone eliminar la ORA en toda la ciudad de València

VALÈNCIA. Una de las medidas más impopulares aprobadas este mandato por la concejalía de Movilidad Sostenible que dirige Giuseppe Grezzi ha tenido que ver con el encarecimiento de la ORA, comúnmente conocida como 'zona azul' de aparcamiento. Una circunstancia originada principalmente por el mayor margen horario en el que los usuarios deben pagar si hacen uso de ella. 

La medida ha sumado críticas de los partidos de la oposición desde que se aprobó. Ciudadanos y PP han censurado en reiteradas ocasiones que la intención del gobierno municipal era meramente recaudatoria. Ahora, el partido que lidera Fernando Giner en la ciudad ha presentado una moción que será debatida en el pleno municipal de este jueves que propone, directamente, suprimirla. Una propuesta que, con las elecciones a la vuelta de la esquina, define en cierto modo cuál sería la gestión que llevarían a cabo en caso de acceder o participar del futuro gobierno municipal.  

La propuesta de Cs insta al Ayuntamiento a eliminar "a partir del mes de mayo de 2026 las zonas de estacionamiento limitado/regulado, optando por la gratuidad en el uso de las plazas". Una medida que respetase, eso sí, "el establecimiento de plazas gratuitas específicamente reservadas para residentes, carga y descarga, y comerciantes" en aquellas calles o barrios que se determinase, para lo que se debería atender las diferentes necesidades de los vecinos.  

La intención, por tanto, sería no renovar el contrato con la empresa adjudicataria de la gestión del aparcamiento regulado "cuando por fin venza en el año 2026, para respetar los tiempos legales del contrato en curso". "Estamos pagando por aparcar en la calle cuando el Ayuntamiento no ofrece ninguna compensación por ese servicio, ni seguridad, ni vigilancia ni nada", añade Giner.

A juicio de los naranjas, la gestión de este servicio ha permitido a los gestores municipales recaudar más de 8,1 millones de euros en 2022, una cifra significativamente más elevada que la que preveía recaudar en dicho ejercicio -la previsión era alcanzar los 7 millones de euros- y "en línea con lo que tenía presupuestado recaudar en 2023".  

"Procede dar un giro de 180º a la actual configuración del estacionamiento limitado/regulado en la ciudad, terminando con un expolio a los vecinos que va creciendo a medida que se incrementan las plazas de estacionamiento limitado/regulado", expone la moción presentada. "Procede apostar por la gratuidad en el uso de las plazas de estacionamiento en la vía pública", añade el partido en su propuesta, en la que también concluyen que se debe "favorecer el acceso al comercio y hostelería del centro comercial" de València a quienes "por cualquier circunstancia, deban hacerlo en vehículo privado".  

El cambio de hora

El próximo mes de mayo se cumplirán dos años desde que el Consistorio suprimió la gratuidad de las zonas de estacionamiento regulado -ORA- durante las dos horas de la comida -14h a 16h- y entre las 20h y las 21h. Tres horas más de pago que supusieron un beneficio extra para Estacionamientos y Servicios (Eysa), la empresa que se acababa de adjudicar un concurso que no preveía ese aumento del horario. Una modificación decidida por el concejal Grezzi que recibió críticas por parte de negocios de hostelería y de comercio y cuya intención era, según la concejalía de Movilidad Sostenible, "desarrollar las políticas de movilidad urbana" del Ayuntamiento de València.

Por otro lado, también se ampliaron los momentos del día que eran de pago en 45 zonas de la ciudad. Períodos en los que no había que pagar, dejaron de ser gratuitos. Por ejemplo, las tardes de entre semana en algunas áreas; los sábados por la mañana, en otras; o incluso todo el día del sábado en algunas. Medida que afectaron a barrios como Eixample, Extramurs, Pla del Real, Patraix o Quatre Carreres.

El cambio no solo supuso un aumento de la recaudación, sino también un crecimiento en las multas. Hasta septiembre del año pasado, se habían puesto 184.000 sanciones por incumplimiento de la ORA, según los últimos datos que ofreció el PP, además de recaudar cuatro millones de euros por el estacionamiento en las zonas azul y naranja. Entre los barrios más afectados por las multas se encuentran Mestalla, Roqueta, Gran Vía, Pla del Remei y Botànic-Petxina.