VALÈNCIA. (EFE). El considerado cabecilla de la trama Gürtel, Francisco Correa, comparecerá mañana por videoconferencia en la comisión de investigación del Congreso sobre la supuesta financiación irregular del PP, si bien ya ha dejado claro que no piensa responder a las preguntas de los parlamentarios.
Correa, que lleva casi un año en prisión tras ser condenado a 13 años de cárcel por el caso Fitur, ha alegado que no quiere perjudicar su estrategia de defensa en los procedimientos judiciales que le afectan.
Tiene obligación legal de comparecer ante una comisión de investigación, pero no está obligado a responder a las preguntas de los diputados, ni a declarar en su contra.
En uno de esos procesos, en el que afecta al PP de la Comunidad Valenciana, Corra relató recientemente en la vista oral el presunto funcionamiento de esa financiación ilícita y apuntó a Ricardo Costa como el responsable del PP valenciano que les obligó a facturar trabajos a empresarios si querían saldar la deuda contraída con el partido por la organización de actos electorales.
Además, Correa ha obtenido el permiso del juez para declarar por videoconferencia desde la cárcel, de modo que no tendrá que ser conducido desde el centro penitenciario hasta el Congreso.
Tampoco declarará ante la comisión el considerado blanqueador de la red corrupta, Ramón Blanco Balín, cuya cita se ha aplazado ante la inminencia de su citación en el juicio que se sigue por la trama valenciana del caso Gürtel.
Según la declaración del exsecretario general de los populares las constructoras pagaron 500.000 euros a cambio de adjudicaciones