VALÈNCIA. El Ayuntamiento de Cullera ha decidido reabrir por completo las playas y el paseo marítimo y el mercadillo de los jueves. Este alzamiento de las restricciones se debe, según el consistorio, a la tendencia a la baja del número de contagios por covid-19, tanto en la localidad como en el resto de la comarca.
De hecho, Salud Pública ha trasladado a la administración local que se han registrado un total de 67 casos activos en los últimos 14 días en la ciudad. Esto supone una tasa de 308,57 positivos por cada 100.000 habitantes. Cabe recordar que el pasado 25 de enero el municipio alcanzaba su máximo de toda la pandemia: una tasa de 2.247,5. Por tanto, las últimas tres semanas ha reducido la incidencia un 86%.
Ante el preocupante escenario que se vivió en Cullera durante las últimas semanas, el ayuntamiento decretó, entre otras restricciones, el cierre de playas y del paseo marítimo durante tres fines de semana como medida de contención y para restringir la movilidad ante la situación preocupante que vivía todo el territorio valenciano.
Ahora, tras a mejora de los datos, el consistorio ha decidido reabrir la playa y el paseo marítimo. No obstante, la administración ha avisado de que reforzará la vigilancia y los protocolos para el cumplimiento de las medidas sanitarias en los 15 kilómetros de playas con los que cuenta el municipio.
A partir del próximo 18 de febrero se retomará el mercadillo que tiene lugar cada jueves en la localidad, después de que el ayuntamiento decidiera suspenderlo temporalmente debido a las preocupantes cifras de incidencia del virus en Cullera. Esta actividad se retomará en una nueva ubicación, concretamente en la zona de la Bega, un entorno que, según apuntan desde el consistorio, cuenta con más amplitud para que los protocolos de seguridad y la actividad comercial se puedan desarrollar correctamente.
Además, la administración local ha comunicado a los vendedores ambulantes que no tienen que abonar la tasa por la ocupación de la vía pública en los próximos seis meses. Desde el ayuntamiento también han recordado que con el Plan Resiste, al que se ha adherido Cullera y que supondrá la inyección de casi un millón de euros para el tejido socioeconómico local afectado por la pandemia, los vendedores ambulantes que tengan su domicilio en la ciudad recibirán una línea de ayuda directa como el resto de sectores.