Foto: EUROPA PRESSVALÈNCIA. Los 15 kilómetros de costa que recorren la ciudad de Cullera y su paseo marítimo han superado el primer fin de semana cerrados al público para evitar aglomeraciones e intentar controlar la expansión del virus. Las más de 60 horas en las que vecinos y visitantes no han podido acceder a las playas se han vivido con "tranquilidad", según explican desde el ayuntamiento. De hecho, la Policía no ha interpuesto ninguna sanción por incumplir esta restricción.
Y es que, la subida de temperatura de la semana pasada que invitaba a estar al aire libre, dejaba imágenes de multitud de personas en distintas playas de la Comunitat Valenciana como, por ejemplo, la de la Malvarrosa en la ciudad de València. Ante este escenario, el ayuntamiento de Cullera decidió cerrar el acceso a estos espacios. Concretamente, el pasado jueves anunciaba que desde las 15 horas del viernes hasta las 6 horas del lunes, no se podría estar ni en las playas ni en el paseo marítimo. Una restricción que se ampliará hasta el 15 de febrero.
Pocas horas después de que concluya este primer fin de semana "sin playa", desde el consistorio hacen un balance positivo y destacan que ha habido muy poca asistencia y que no se ha multado a nadie por esta cuestión. "Solo se ha informado en algunos casos a personas despistadas y poca cosa más", señalan. Para lograr que el cierre fuese efectivo, la administración local tuvo que doblar los dispositivos propios y han contado con la ayuda del personal de protección civil, de "agentes covid" que se han encargado de informar a las personas que estaban por la zona de las nuevas restricciones, así como con agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local.
Los bares, cafeterías, restaurantes y pubs que componen el paisaje del paseo marítimo de la ciudad hace semanas que tienen la persiana bajada. No obstante, en esta zona de costa también hay comercios, tiendas u otro tipo de establecimientos que sí pueden estar abiertos. Para garantizar su actividad, desde el consistorio señalan que durante el fin de semana "los comercios y sus clientes han tenido accesos garantizados en todo momento en el paseo".
En el caso de Cullera, cabe destacar que desde ayuntamiento se ha optado en muchas ocasiones por llevar a cabo una estrategia de prevención frente a la pandemia. No solamente en este caso, siendo la única ciudad costera de la Comunitat Valenciana que ha cerrado las playas y el paseo marítimo, sino también en verano, cuando Sanitat cerró el ocio nocturno. En aquel momento, en el mes de agosto, la ciudad decidió cerrar las playas a partir de las 22:30 horas para evitar que esas actividades se trasladaran a este espacio.
La prevención también fue el motivo por el cual, en el mes de noviembre, el equipo de gobierno adoptó algunas medidas extraordinarias, pese a que los datos en Cullera eran menos preocupantes que en los municipios del entorno. Sin embargo, en las últimas semanas, los contagios y la incidencia acumulada en la ciudad se ha disparado. Eso le llevó a ser el primer municipio de la Ribera que solicitó a Sanitat que se adoptara restricciones "más contundentes". Cullera, junto a otras localidades de la comarca, pidieron además una reunión telemática "de urgencia" con la consellera Ana Barceló, y más coordinación en los datos entre administraciones.
Clamor en la Ribera: varios ayuntamientos piden más restricciones tras dispararse los contagios
Hay que recordar que Cullera empezaba el año con una tasa de contagios de 373 casos por cada 100.000 habitantes. Pero, tras la detección de los positivos que se produjeron días antes, durante las fiestas navideñas, estos datos aumentaron significativamente. El pico lo alcanzaron entre el 18 y el 25 de enero, cuando la incidencia acumulada escaló hasta los 2.247. Ahora, tras aplicar las restricciones autonómicas y municipales, la curva está bajando y se ha reducido hasta los 1.547 positivos por cada 100.000 habitantes.
