VALENCIA. La Conselleria de Infraestructuras que lideró Isabel Bonig durante la pasada legislatura ordenó rechazar, por falta de presupuesto, un total de 1.100 solicitudes de ayuda a la vivienda por valor de 60 millones de euros, según ha denunciado este martes la actual consellera María José Salvador.
Según ha denunciado la dirigente, Bonig redactó una instrucción interna en 2013 en la que instaba a las direcciones territoriales a denegar en bloque la totalidad de estas 1.100 ayudas por falta de fondos, una orden que las delegaciones incumplieron.
No obstante, la consecuencia fue que no se tramitaron. "Literalmente se guardaron en un cajón, no estaban ni informatizadas", ha criticado Salvador.
El montante de 60 millones en ayudas no tramitadas se suma a otros 40 reconocidos por el actual Consell, correspondientes a las solicitudes sujetas a la resolución 501, que vinculaba el pago a la llegada de consignación presupuestaria.
A su vez, estos alrededor de 100 millones se suman a otros 240 que la conselleria de Bonig reconoció tras un duro informe de la Intervención de la Generalitat que consideraba fraude de ley haber ofertado ayudas a la vivienda sin consignación presupuestaria.