Natxo Costa, director general de Comercio, y Rafael Climent, conseller de Economía. Foto: EVA MÁÑEZVALÈNCIA. Los directores generales de Comercio de las comunidades autónomas de Andalucía, Aragón, Asturias, Castilla-La Mancha, Cataluña, País Vasco, Extremadura, Islas Baleares y Navarra recibieron el pasado miércoles un correo electrónico de Natxo Costa, su homólogo en la Comunitat. El dirigente valenciano les informaba de que en una "reunión informal" mantenida a principios de mes con los representantes catalanes, vascos y baleares los cuatro participantes acordaron "coordinar acciones en materia de comercio (...), sobre todo en lo referente a la continua invasión de competencias en materia de comercio interior por parte del Ministerio".
"Los presentes en la reunión de Barcelona me encargaron que iniciara una ronda de contactos con vosotros, para haceros partícipes de esa voluntad de colaboración, en la medida que la consideréis conveniente", continuaba Costa en su misiva dirigida a las citadas direcciones generales, todas ellas en manos del PSOE menos las que ostentan Junts pel Sí y Nafarroa Bai en Cataluña y Navarra, respectivamente.
Se trata, según explica el propio Costa, de las autonomías con un posicionamiento más claro en contra de la libertad de horarios comerciales impuesta por el Gobierno Central en las grandes ciudades de España mediante la figura de las Zonas de Gran Afluencia Turística (ZGAT), áreas en las que el gran comercio puede abrir sus puertas los domingos y festivos. No obstante, con posterioridad la alianza tratará de hacerse extensible a otras regiones como Cantabria o Islas Canarias.
La Conselleria de Economía Sostenible de la Generalitat Valenciana, liderada por el Rafael Climent, persigue desde el cambio de gobierno de 2015 acabar con la declaración de estas áreas que, en ciudades como València y Alicante, se han traducido en grandes espacios de libre apertura dominical. Contra esta circunstancia la Generalitat ha intentado múltiples fórmulas, incluso la negociación con los grandes operadores para, simplemente, reducir su impacto, tal y como llegaron a conseguir en València y Alicante hasta que prosperó un recurso de los centros comerciales.
Pero Costa tiene entre ceja y ceja el flanco de ataque nacional, sabedor de que eliminar la imposición en la norma estatal podría acabar con este fenómeno de la noche a la mañana. Para lograr este objetivo el dirigente y su partido (Compromís) están negociando con todos los partidos políticos de izquierdas o nacionalistas con el objetivo de acometer el cambio en el Congreso de los Diputados, dejando en minoría al PP de Mariano Rajoy en el parlamento.
En esta línea, Costa arenga a sus homólogos de las autonomías díscolas: "Estimamos que sería muy conveniente establecer contactos y coordinación con nuestros respectivos grupos parlamentarios en el Congreso, así como con las patronales de comercio de nuestras respectivas CCAA", indica.
Respecto a las patronales, cabe subrayar que el pequeño comercio de la Comunitat también se está movilizando a nivel nacional con el objetivo de tumbar el escenario implantado por el PP durante la anterior legislatura. Lo hace a través de las confederaciones Cecoval -que recurre a su vicepresidencia en la patronal nacional para actuar como lobby ante los partidos políticos-, y Covaco -que, con el mismo propósito, ha tendido puentes a entidades de Cataluña, Baleares y País Vasco en el marco del Foro de Comercio de Benicarló, con el que Natxo Costa mantiene un diálogo fluido-.
"Por todo ello, os invito a que incrementemos la fluidez de los contactos y el intercambio de información entre nuestras direcciones generales, con el objetivo de poder ejercer mejor nuestras competencias en materia de Comercio", concluye el escrito de Costa, en el que plantea a los directores generales celebrar una reunión entre todos los participantes de la alianza contra la libertad de horarios comerciales de Rajoy.
