VALÈNCIA. La Generalitat Valenciana ha inicia el camino para poner en marcha sus ayudas a aceleradoras de empresas culturales, la última pata pendiente de los fondos europeos sectoriales. Lo hace con una propuesta más definida y casi dos años más tarde de su propio planteamiento.
“El apoyo a aceleradoras culturales permitirá acelerar el crecimiento de profesionales, startups y empresas abarcando todo el sector de la cultura valenciana, desde editoriales hasta compañías de producción o distribución artística y musical, artes escénicas, artesanía, diseño en todas sus modalidades, moda o videojuegos entre otras, que podrán desarrollar su plan de modernización. El programa pretende reducir los tiempos y aumentar las posibilidades de éxito en el proceso de modernización de empresas y la aceleración de nuevas líneas de negocio cultural. El enfoque será de carácter práctico y permitirá fomentar el networking con otras empresas del sector y también preparar su internacionalización”, reza el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana, que publicó ayer un llamamiento, en forma de sondeo, de empresas que estarían interesadas en participar como aceleradoras en la posible convocatoria de ayudas.
“Los proyectos contarán con una parte de transferencia de capital (capítulo VII) de un 70 % y una parte de apoyo mediante transferencia corriente (capítulo IV) del 30 % para actividades como formación, mediación, incubación o mentoría en aceleración cultural que tengan por objeto la aceleración de proyectos culturales de las entidades creativas y culturales para reforzar el papel del sector como motor de la economía valenciana, digital y sostenible, y elemento de cohesión social y territorial”, adelanta el Consell.
La convocatoria se realizará a lo largo de 2023 a empresas que apoyen “procesos de aceleración cultural en el ámbito de las industrias culturales y creativas, realizados entre el 1 de enero de 2022 y el 31 de diciembre de 2026, que les permita crecer y desarrollar su potencial, sirviendo así de polo de atracción económico y generación de empleo”.
Las ayudas subvencionarán tanto “la participación por los beneficiarios en programas de incubación o aceleración” como “la colaboración mediante la interacción de la experiencia y el conocimiento, de un proyecto cultural de la Comunitat Valenciana, con las soluciones de aceleración que le proponga desarrollar una entidad dinamizadora de la incubación o aceleración, y concluya con la mejora de un proyecto preexistente o la creación de un proyecto viable, con garantías de implementarse en el ecosistema cultural de la Comunitat Valenciana”.
Lo publicado ayer tan solo es un sondeo para que las empresas envíen sus datos. Ni las bases ni la convocatoria se han publicado aún, aunque estaría previsto a lo largo de 2023. A preguntas de este diario a la Conselleria de Cultura sobre el presupuesto y los plazos previstos, esta no ha respondido.
Ya en 2021, Culturplaza adelantó que este plan estaría encima de la mesa. Antonio Bravo, entonces subdirector general de Patrimoni Cultural i Museus de la Conselleria de Cultura, habló en el Trovam sobre trasladar el modelo Lanzadera al ámbito cultural. Se trataría de una convocatoria para que 25 proyectos pudieran despegar económicamente y sacar un rendimiento mientras no pierdan su intención por alimentar el tejido cultural. Todo apunta a que el modelo a cambiado, y en vez de buscar los proyectos que acelerar, solo podrán subvencionar a las propias aceleradoras. “El programa es tan ambicioso que ha habido problemas internos para entenderlo”, comentaba entonces. La dotación económica estaba prevista en 2.600.000 euros.