VALÈNCIA. Uno de los puntos flacos en la efectividad del gobierno municipal de València en sus dos mandatos fue la construcción de vivienda. El consistorio activó un plan de construcción de 327 viviendas públicas por parte de la empresa municipal Aumsa, de las cuales apenas 15 se entregaron antes de las elecciones, y se irán materializando en los próximos años. Pero además, la concejalía de Vivienda buscó impulsar un proyecto para vivienda social en el centro de València. Una iniciativa, la primera del departamento -antes de 2015 no existía dicha concejalía- que hoy en día, cuatro años después y con el PP y Vox al mando del ejecutivo local, sigue sin hacerse realidad.
La iniciativa municipal consta de un edificio de cuatro plantas que albergue una docena de viviendas. Los pisos, por su parte, se pretendían sumar al parque municipal de alquiler asequible, cuyo precio oscilaría entre los 250 y los 450 euros mensuales. Además, la previsión inicial era que la planta baja del edificio tuviera un uso cultural y educativo, y que pudiera recibir visitas turísticas en determinados horarios para contemplar los restos arqueológicos que se encuentren, mientras que las plantas superiores se dedicarían exclusivamente al uso residencial.
El hecho de ubicarse la actuación en pleno casco histórico de València añade un punto de complejidad por los más que probables hallazgos arqueológicos. De hecho, el solar ya presentaba restos de lo que un día fue un edificio monumental: un palacio tardogótico del siglo XV o XVI. Y desde el departamento de Vivienda, que el pasado mandato dirigía la edil de Compromís Isa Lozano, ya esperaban encontrar restos y materiales de época contemporánea, moderna, medieval y romana.
Precisamente es la fase de trabajos arqueológicos a la que todavía no se ha llegado tras cuatro años del anuncio. En ese sentido, fuentes del departamento de Vivienda, que ahora está bajo el paraguas de la concejalía de Urbanismo encabezada por el popular Juan Giner, explican a Valencia Plaza que antes de llevar a cabo las excavaciones arqueológicas, el Ayuntamiento debe construir un muro pantalla en aras de la estabilidad de los edificios próximos. "Patrimonio está redactando un pliego para adjudicar la construcción" de esta estructura, aseguran al respecto, y subrayan que para ese menester se ha habilitado una partida presupuestaria este mismo año.
El proyecto de edificación, sin embargo, no se puede llevar a cabo sin el estudio arqueológico de la parcela, que deberá contratar el servicio de Patrimonio Histórico y Cultural para la excavación en extensión del solar y el informe de los resultados. Será, una vez se hayan realizado estas actuaciones, cuando el departamento de Vivienda tenga que "redactar el proyecto y adjudicar la construcción del edificio". Unos trámites administrativos restantes que
Así pues, teniendo en cuenta los plazos que maneja la administración municipal para la adjudicación de contratos y la construcción de viviendas, es poco probable ver materializado el proyecto a corto y medio plazo. Contrasta con la previsión realizada en 2020 por la entonces edil de Vivienda, Isa Lozano, quien esperaba entonces poner en marcha la fase arqueológica "próximamente" para elaborar el proyecto de construcción y empezar las obras en 2021. Pero nada más lejos de la realidad, a la vista de los acontecimientos.