VALÈNCIA. (EFE) Banco Sabadell presentará este lunes a analistas e inversores en Londres la actualización del plan estratégico de TSB, su filial británica, que estará centrado en la mejora de la eficiencia y la rentabilidad, después de la crisis informática que la entidad sufrió en 2018 con el cambio de plataforma tecnológica.
El Sabadell tiene prevista la celebración de una reunión con expertos e inversores institucionales a las 11:00 en un hotel de la 'City', y ese mismo día publicará la documentación de la nueva hoja de ruta de TSB en la web de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En marzo de 2015, Banco Sabadell llegó a un acuerdo con Lloyds Banking Group para la compra de TSB por un importe de 1.700 millones de libras esterlinas (unos 2.400 millones de euros), aunque no fue hasta abril de 2018 cuando el banco español llevó a cabo la integración tecnológica de la filial británica.
Durante esta migración, sin embargo, TSB sufrió una caída de sus servicios, lo que afectó a miles de clientes, que tuvieron problemas para acceder a sus cuentas y operar a través de internet.
Los graves desajustes que se produjeron con el cambio de plataforma acarrearon al Sabadell unos costes extraordinarios de 460 millones de euros y comportaron también el retraso del inicio de la actividad comercial de TSB.
Estas dificultades provocaron incluso el relevo en la cúpula de TSB: hace un año, Debbie Crosbie fue nombrada nueva consejera delegada de la entidad en sustitución de Paul Prester, que presentó su dimisión tras siete años en el cargo.
Aunque el presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, siempre ha mostrado el compromiso de la entidad catalana con TSB, hace unos meses anunció la necesidad de actualizar su plan estratégico por los problemas derivados de la migración.
Será finalmente mañana cuando el Sabadell desvele a los mercados sus objetivos para impulsar su negocio en el Reino Unido, y lo hará con el foco puesto en la mejora de la eficiencia y la rentabilidad de TSB, después de un 2018 complicado, marcado también por la incertidumbre derivada del 'brexit'.