VALENCIA. Feria Valencia acogió este jueves la I Jornada de Debate Sectorial Inmobiliario -patrocinada por la consultora CBRE- en el marco de la feria Urbe, que abre sus puertas este viernes en el recinto ferial de Paterna. En la cita se presentaron las conclusiones de un informe realizado a partir de las opiniones recabadas por un panel de expertos del sector sobre la situación del mercado inmobiliario en la Cominitat Valenciana a fecha de octubre de 2016.
Entre las principales conclusiones de los expertos, que coinciden en subrayar la reactivación del mercado inmobiliario, se encuentra por contra que el ritmo de la recuperación del sector está lejos de la euforia que en ocasiones se transmite. Al respecto, el informe subraya un dato: el número de visados de dirección de obra concedidos en los últimos años hasta 2016 "sigue siendo de los más bajos de la serie histórica y sigue en descenso desde 2011 tanto en Valencia como en Castellón".
"Esto se debe probablemente a que buena parte de los proyectos pasan por una fase de precomercialización larga antes de solicitar licencia e iniciar la promoción, muchas veces con responsabilidades de gestión compartida entre la entidad financiera, un agente intermedio de control y el vendedor final", agrega el documento, que subraya, por contra, que en Alicante "sí se están acompasando los visados efectivamente concedidos al ritmo de las transacciones".
Durante la jornada de este jueves también tuvo lugar una mesa redonda sobre el futuro del sector inmobiliario, en la que algunos de los participantes se pronunciaron en la misma línea. Participaron, entre otros, José Luis Miguel, presidente de la Asociación Provincial de Promotores y Agentes Urbanizadores de Valencia.
Miguel afirmó que en estos momentos la asociación está compuesta "por supervivientes". "Los promotores somos un poco más pesimistas que otros actores a la hora de ver como es este entorno. En Valencia estamos en una zona de recuperación y no nos podemos comparar con lo que ocurre en Madrid y Barcelona", aseguró.
Para Luis Martínez, director nacional de Negocio Inmobiliario y Promotor de Santander España, "hay indicadores que demuestran que la actividad no está creciendo al ritmo de las expectativas creadas". En la misma línea se pronunció Sara Santos, Managing Director de Maxxima Real Estate Advisory. "Los números no han sido tan buenos como se esperaban para este año. La incertidumbre política no ha ayudado".
El presidente de la APC Valencia señaló diferentes motivos por los que resulta difícil salir de la situación de apalancamiento en la que se encuentran los promotores valencianos. "Nos encontramos con nuevos actores, como la Sareb o los servicers inmobiliarios que son nuestros competidores directos. Además, a la hora de promover viviendas tenemos códigos técnicos que a veces resultan absurdos porque se contradicen las propias ordenanzas para su aplicación. También estamos sometidos a unos cambios legislativos de enorme calado. Exigimos que, a la hora de hacer nuevas leyes, exista consenso entre la Administración y los empresarios", dijo.
En este sentido, el director general de Urbanismo, Lluís Ferrando, que también participó en esta mesa redonda, subrayó que lo que tienen que hacer los políticos es "molestar lo menos posible". "Cuando los ayuntamientos se han puesto a hacer promoción de suelo, normalmente, ha salido mal. Hemos de superar esa hipoteca reputacional que tiene la Comunitat Valenciana y acabar con el desprestigio", agregó.
Por su parte, José Luis Miguel comentó que una de las misiones de los promotores "es convencer a la Administración" de que no son "especuladores". "Nosotros somos un sector productivo y la administración nos debe escuchar a la hora de hacer cualquier planificación urbanística. Y es importante que entre todos seamos capaces de saber que modelo de ciudad queremos. No puede ser una decisión de un solo partido político, su responsabilidad es crear reglas de juego claras", subrayó.