VALÈNCIA. Hace apenas unas semanas, el PP de Isabel Bonig afeaba en una junta de síndics la asistencia de los consellers a los plenos de Les Corts. Lo hacía después de que Podemos también exigiese un mayor compromiso de asistencia de los dirigentes del Ejecutivo valenciano a las sesiones quincenales de los miércoles en la Cámara valenciana –los jueves se celebran las sesiones de control y, por norma, suelen, salvo casos excepcionales, acudir todos los primeros escalones–. Sin embargo, el dardo envenenado se le ha dado la vuelta al partido de la gaviota.
Si bien es cierto que, muchos de estos consellers son, a la vez, diputados, también lo es que el parlamentario que más novillos ha hecho a lo largo del curso político 2016/2017 es precisamente Miquel Domínguez, exdiputado del PP. Domínguez pasó a convertirse el octubre pasado en diputado no adscrito al darse de baja del partido cuando el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana le abrió causa al también exconcejal del Ayuntamiento de València por un presunto delito de blanqueo de capitales en el marco del caso Imelsa. Una investigación que finalmente fue archivada por "la insuficiencia de los indicios para acreditar su participación".Así, el parlamentario no ha asistido a un total de 16 plenos.
Es el resultado que se desprende tras revisar todos los diarios de sesiones desde que comenzara el curso político con el debate de política general el 14 de septiembre de 2016 hasta que finalizó el 6 de julio de 2017, independientemente del motivo de la ausencia.
Domínguez es seguido de cerca por el president de la Generalitat, Ximo Puig, que ha fallado a un total de 15 sesiones parlamentarias. En este caso, conviene matizar los numerosos compromisos de agenda que tiene como jefe del Consell, como por ejemplo el viaje a Bruselas para reunirse con el presidente de Thyssenkrup para estudiar en qué punto se encontraba el proceso de reapertura de la planta de Galmed en Sagunt.
Si se realiza también la comparativa del primer año de gobierno de Puig y el de Alberto Fabra, los resultados de asistencias a plenos son similares. De los 50 que se celebraron en el primer año de legislatura del Ejecutivo de Ximo Puig, el president no asistió a un total de 22; mientras que su antecesor, no acudió a 16 de los 41 plenos que se realizaron en su primer año de gobierno.
Más allá de Domínguez y Puig, el ránking de políticos que hacen más novillos en los plenos de Les Corts lo complementan la diputada no adscrita Covadonga Peremarch con 10 faltas; y el conseller de Economía, Rafa Climent, con nueve, que se encuentra empatado con la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra.
Terminan el 'top ten', la parlamentaria popular Elisa Díaz (suma ocho faltas, aunque conviene señalar que al inicio del curso político siguió los plenos desde su casa); el independiente y escritor fichado por Puig, Fernando Delgado (7), que empata en faltas con la consellera de Vivienda, María José Salvador y el diputado de Ciudadanos Emigdio Tormo. Su síndica Mari Carmen Sánchez, con un total de cinco ausencias, cierra la lista.
Además de estos diez primeros, hay también diputados que han faltado a alguna que otra sesión: el diputado del PPCV Alfredo Castelló (4), como el conseller de Educación, Vicent Marzà. Con tres ausencias se encuentran el parlamentario y exsecretario de Organización del PSPV, Alfred Boix, María José Catalá (PP), Marta Gallén (PP), Alberto García (No Adscrito), José Muñoz (PSPV), Maite Parra (PP) y Domingo Rojo (No Adscrito).
Más abajo en la lista, pero con dos borrones en su historial de asistencias, se encuentran 11 parlamentarios de todos los grupos, a excepción de Podemos. Son Mónica Àlvaro (Compromís), Belén Bachero (Compromís), Vicente Betoret (PP), David Cerdán (PSPV), Fran Ferri (Compromís), Blanca Garrigues (PP), Noelia Hernández (PSPV), Mireia Mollà (Compromís), Juan Ponce (Compromís), Luis Santamaría (PP), Tony Woodward (Ciudadanos).
Sin embargo, el arcoiris es total entre los diputados que han hecho novillos una sola vez en todo el curso político. Con el síndic de Podemos, Antonio Montiel, y la síndica del PP, Isabel Bonig, como representantes más destacados de este grupo, Josep Almería (Podemos), Mercedes Caballero (PSPV), Juan Carlos Caballero (PP), Marian Campello (Compromís), Vicente Casanova (PP), María Sabina Escrig (PSPV), María José Ferrer (PP), Rosa García (Ciudadanos), Teresa García (Compromís) Alexis Marí (No Adscrito), David de Miguel (No Adscrito), Sandra Mínguez (Podemos), Marc Pallarés (Podemos), Rosa Peris (PSPV), Manuel Pineda (PSPV), Toñi Serna (PSPV), Víctor Soler (PP), Clara Tirado (PSPV) y Mercedes Ventura (Ciudadanos) completan esta parte de la lista.
Los hay también que no suman ninguna ausencia, que han asistido a todos los plenos del período analizado. José Juan Zaplana (PP), Concha Andrés (PSPV), Emilio Argüeso (Ciudadanos), Vicente Arqués (PSPV), Ana Barceló (PSPV), Jorge Bellver (PP), María Bernal (PP), Antoni Bertomeu (PP), Rafael Briet (PSPV), Cristina Cabedo (Podemos), José Ramón Calpe (PP), José Císcar (PP), Juan Córdoba (Ciudadanos), Antonio Estañ (Podemos), Graciela Ferrer (Compromís), Alejandro Font de Mora (PP), María José García (Ciudadanos), Francisco Javier García Latorre (Compromís), Víctor García (Compromís), Beatriz Gascó (PP), Beatriz Gascó (Podemos), Daniel Geffner (Podemos), Rubén Ibáñez (PP), César Jiménez (Podemos), Jordi Juan (Compromís), Verónica Marcos (PP), Sandra Martín (PSPV), Carmen Martínez (PSPV), Manolo Mata (PSPV), Fabiola Meco (Podemos), Enric Morera (Compromís), Miguel Ángel Mulet (PP), Rosa Mustafá (PSPV), Josep Nadal (Compromís), Juan de Dios Navarro (PP), Isaura Navarro (Compromís), María Josep Ortega (Compromís), Eva Ortiz (PP), Fernando Pastor (PP), Manuel Pérez (PP), Llum Quiñonero (Podemos), Cristina Rodríguez (Compromís), José Salas (PP), Ignacio Subías (PSPV), Toni Subiela (Ciudadanos), David Torres (Podemos) y Remedio Yáñez (PP) son los diputados que no tienen ninguna falta en su historial. Los únicos que no han hecho novillos en este curso político.
