VALÈNCIA. Sin duda, uno de los momentos más impactantes del inicio de legislatura se produjo en julio de 2023 con la investidura como presidente de la Diputación de Valencia de Vicente Mompó, candidato del PP.
Ens Uneix, partido con base en Ontinyent impulsado por el exsocialista Jorge Rodríguez, sólo contaba con una diputada, Natàlia Enguix, pero esta dirigente era precisamente la que disponía de la llave para permitir el gobierno del PP o cederlo en cambio al PSPV que tenía al alcalde de Mislata, Carlos Fernández Bielsa, como aspirante.
Finalmente, Ens Uneix dejó que Mompó gobernara y Enguix se situó como vicepresidenta, respetándose su condición de que Vox no entrara en la ecuación. Las razones esgrimidas para que la formación independiente se aliara con el PP fueron varias: los populares también controlan la Generalitat, de la que dependen muchas inversiones para la comarca; la dirección del PSPV estaba todavía en manos de Ximo Puig, al que culpaban de la caída política de Jorge Rodríguez y, en general, tampoco se sentían cómodos con alcanzar un acuerdo con Bielsa. Aquel pleno acabó con gritos e insultos de algunos de los afines a este dirigente socialista hacia Ens Uneix, lo que provocó que las heridas entre ambas formaciones continuaran abiertas.
Tras eso, el primer año de gobierno entre PP y Ens Uneix fue un idilio del que también participó el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, con quien se ejerció complicidad en sus visitas a Ontinyent. Mientras, con Mompó en la corporación provincial todo funcionaba como la seda.
No obstante, en las últimas semanas las cosas han empezado a cambiar. "Como ciudadana, creo que Mazón debe dimitir". Esta frase fue pronunciada por Natàlia Enguix, diputada de Ens Uneix y vicepresidenta de la Diputación, en una entrevista reciente en eldiario.es. La dirigente se refería a la gestión del presidente de la Generalitat sobre la Dana, pero es cierto que en los últimos tiempos, el tono de esta formación ya venía elevándose con cuestiones relacionadas con la memoria democrática, el valenciano o en la negociación presupuestaria.
La Dana ha dejado al PP y a sus dirigentes con una imagen más debilitada. No sólo a Mazón, también a Mompó -especialmente por su visita a 'Salvados' y por algunas defensas al presidente de la Generalitat-. Esto hace que el diputado de Ens Uneix se deba pagar más caro: o al menos, esto es lo que parece. Después de la Dana, las fotografías o acuerdos visibles con Mazón y Mompó resultan ahora mucho menos rentables y atractivos, por lo que la formación de Rodríguez está decidida a aprovechar la alianza de otra manera.
En este contexto, se produce ahora el pulso del que informó este martes Valencia Plaza. El recambio obligado en la presidencia de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP), dado que la elegida en su día, Rocío Cortés (PP), ya no es alcaldesa debido a una moción de censura en su municipio, es una cuestión de la que Ens Uneix quiere participar proponiendo a un alcalde independiente. El PP, que quería situar a la alcaldesa de Xirivella, Paqui Bartual, debe decidir ahora si accede a la petición: todo apunta a que sí, puesto que Ens Uneix sigue teniendo la llave de la Diputación.
Más aún, Ens Uneix quiere también cambiar al consejero propuesto por la FVMP para À Punt, que fue elegido por el PP, pese a que fuentes próximas a Rodríguez aseguran que estaban negociando con Mompó la inclusión de un perfil independiente.
Dos cuestiones a resolver que ponen de manifiesto cómo el partido nacido en Ontinyent ha empezado a enseñar los dientes al PP. En la oposición ya hay quien hace esta cuenta: "Primer año felicidad, segundo año exigencias y tercer año crisis. A partir de ahí, en la recta final de la legislatura, Ens Uneix a presidir la Diputación para ser más visible de cara a las elecciones". ¿Verdadero o falso?