VALÈNCIA (EP). Productos frescos, legumbres, frutas y hortalizas, pescados, frutos secos y aceite de oliva son los productos que más han subido en el carro de la compra de estas últimas semanas, coincidiendo con el confinamiento. Por el contrario, se ha observado un incremento de compra de productos precocinados y azúcar, muy utilizado para preparar postres caseros, según un análisis de la Fundación Española de la Nutrición con datos de consumo del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA).
Según la FEN, "el incremento de consumo de productos básicos de la dieta mediterránea es una muy buena noticia". "Confiamos en que poco a poco se vaya observando de manera continuada en el tiempo que los hábitos de compra de los ciudadanos se van asentando hacia una alimentación más saludable que la que veníamos viendo años atrás en el Panel del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación", señalan.
Sin embargo, a pesar de estos incrementos de productos básicos de la pirámide de la dieta mediterránea, indican también se ha observado un aumento de compra de bebidas que habitualmente se consumen en hostelería, como es el caso de las bebidas espirituosas, vino, cerveza o refrescos.
Además, han registrado un incremento de compra de productos precocinados y azúcar que, junto a las harinas, se han utilizado mucho estos días para la preparación de postres de muy diferentes tipos. "Debe insistirse en el caso de las bebidas en la necesidad de priorizar el agua como fuente de hidratación en todos los grupos de edad, y en la necesidad de la moderación en los casos de la repostería y bollería caseras, priorizando siempre la fruta en el postre y otros momentos como el desayuno", insisten.