Los paros responden a un ajuste en la previsión de ventas por el que la industria prevé fabricar 4.000 vehículos menos este año
VALENCIA. Ford Almussafes vuelve a interrumpir su producción, y esta vez no lo hace a causa del desabastecimiento de piezas por parte de sus proveedores. La caída de la demanda de vehículos en Europa le ha hecho levantar el pie del acelerador, y para reducir la producción la multinacional ha decidido parar la planta los próximos días 27 y 30 de mayo -el viernes y el lunes que viene-.
Para ello la enseña ha adelantado un nuevo día de las denominadas vacaciones flexibles de los trabajadores, de modo que ya ha consumido la totalidad de estas jornadas hasta el año 2018. Ford cuenta con este instrumento de flexibilidad tras un pacto alcanzado en 2009 con los trabajadores.
Así lo explica el secretario general de UGT-PV en Ford Almussafes, Carlos Faubel, que agrega que el día restante de paro -el que se realizará el lunes- en principio se canjeará por el descanso fijado para el próximo 23 de diciembre. En caso de requerir un nuevo descanso llegado ese día Ford tratará de cubrirlo con las vacaciones particulares de los trabajadores. Esta decisión se tomará en el mes de octubre.
Los paros responden, según Faubel, a "un ajuste en la previsión de ventas". En la actualidad Ford fabrica 1.990 vehículos al día en Almussafes, de modo que con ambos descansos la compañía lograría su objetivo de fabricar 4.000 vehículos menos de los previstos este ejercicio, tal y como informaba este martes Levante-EMV.
El acuerdo con la plantilla para el canje de días se ha alcanzado con el voto en solitario del sindicato UGT-PV, que cuenta con mayoría absoluta en el comité de empresa de la filial valenciana de Ford.