VALÈNCIA. "¡Triste época es la nuestra! Es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio", decía Einstein ya por aquel entonces. Pocas presentaciones hacen falta de hecho para el científico y pensador más popular del siglo XX. Desde la relatividad espacial al movimiento Browniano, su vida acumula una lista de logros y aportaciones tan extensa que pocos son los que se atreven con ella. Pero, ¿y lo relevante que puede ser conocerla, más si cabe, desde nuestra infancia? Así lo entienden desde 'Colección de científica', un equipo valenciano que revisita a los clásicos- y no tan clásicos- de la ciencia, para rememorar sus vidas y logros que, posteriormente, plasman en una serie de tebeos destinados a los más pequeños.
"Los grandes genios también fueron niños y en la propia infancia es además donde muchos de ellos descubrieron que les apasionaba la ciencia, o simplemente sentían gran curiosidad. Por eso, nos parece que puede ser muy inspirador para los pequeños conocer sus historias", explica Jordi Bayarri, encargado del guión y dibujo de las obras. Junto a él, Tayra Lanuza es quien realiza las tascas de documentación y Dani Seijas del color.
Desde entonces han tejido un serie que ya alcanza, en efecto, hasta los ocho científicos: Darwin, Galileo, Newton, Marie Curie, Ramón y Cajal, Aristóteles, Hipatia y ahora Albert Einstein. Pero, ¿en qué se criterios se basan para decidir quién entra y quién no en la colección? "A parte de la relevancia que haya tenido su trabajo en la historia de la ciencia, queremos ofrecer una imagen que en conjunto sea lo mas amplia posible. Por ejemplo, intentamos que no sean solo científicos de los últimos 100 150 años, también hay personajes en la Edad Media o el Renacimiento, como Arístoteles. Queremos que los niños vean que el trabajo científico se hace desde siempre. Por el otro, tratamos de alternar las disciplinas para que no siempre sea física o matemáticas, también hay medicina o astronomía".
No obstante, entre la lista de estas primeras series ya se empieza a detectar la invisibilidad de las mujeres científicas: "Hay muchas profesionales con trabajos muy interesantes, el problema es que no tenemos suficiente respaldo de los lectores. También nos ocurre con los muchos científicos árabes que hay. Pero desafortunadamente, el ser una editorial tan pequeña nos condiciona mucho a lanzarnos con personajes desconocidos", expone Bayarri. En efecto, la obra no se publicará hasta alcanzar la campaña de micromecenazgo que han establecido para su distribución. Así mismo, de cara al año que viene el valenciano ya tiene claro que van a ilustrar a Ada Lovelace y Pasteur.
Desde su época como estudiante, a su dificultad por encontrar trabajo, condensar la vida "de los científicos de antaño" en pequeñas viñetas es una tarea, como mínimo, laboriosa. Ver como quedan tantas palabras, hojas y documentos compilados en unas cuantas palabras, se convierten en una de las herramientas "más asequible" para los lectores primerizos. Es por eso que Bayarri considera que "no se aprovecha suficiente su capacidad de divulgación". "El cómic es un lenguaje muy visual y asequibles para cualquier persona, independientemente del grado de estudios que tenga o costumbres de leer. Su lectura es muy fácil de asimilar. Claramente, se podrían hacer más cosas en educación. Por eso, también queremos tratar de aprovechar las bondades del tebeo porque es un lenguaje naturalmente dotado para ello".