VALÈNCIA (EP/VP). El escritor José Ovejero asegura que le gustaría que, al acabar una de sus obras y llegar a la última página, los lectores "no cerraran el libro". "Aspiro a que mis historias tengan un eco en el lector".
Así lo ha aseverado el autor en una entrevista concedida a Europa Press con motivo de la presentación en València, de 'Mundo extraño' (Páginas de Espuma), su nuevo lanzamiento en el que regresa al género del relato.
"Ha sido un reencuentro muy bonito, he pasado muchos tiempo pensándolo, porque no acababa de ver cómo contar. Yo había escrito varios libros de relatos y me interesaba expandir los límites de la literatura en el cuento porque me daba la impresión de que en este género me había quedado estancado", recuerda.
El "detonante" para comenzar a escribir fue darse cuenta de que en su literatura "había cultivado dos corrientes: una más realista y otra más desaforada". "De pronto me di cuenta de que eran dos maneras de asomarme a la realidad con mi literatura, como unir los dos 'ovejeros'", ha resumido.
El escritor ha definido a 'Mundo extraño' como un "libro de relatos, en cierto sentido, bastante lúdico, ya que va pasando de un ritmo a otro, de unas voces narrativas a otras y hay un juego en el que los lectores deben participar".
A veces, apunta, "alguno de los cuentos pueden parecer absurdos, pero en ese mundo extraño que es el nuestro inclusos mis cuentos más delirantes están hablando del lector, de la realidad".
Ovejero considera que el mundo "ha sido siempre extraño". "No creo que vivamos en un mundo peor que el de antes; nunca he sido muy apocalíptico. Hoy los riesgos son más importantes porque las tecnologías son más poderosas y quizás estemos más perplejos ya que hemos perdido incertidumbres, lo que no siempre es malo".
Finalmente, el autor se ha referido a su próximo libro, que ya está escrito, ya que es una obra de poesía, 'La mujer lenta', que le valió en 2017 el premio Juan Gil-Albert.