VALÈNCIA. La alcaldesa de València, María José Catalá, ha declarado en no pocas ocasiones que Vox es un “socio preferente” para el gobierno del Partido Popular, una alianza que, en cualquier caso, parece que ni está ni se la espera en el ámbito de la cultura. Así lo dejó claro el portavoz de Vox en el Ayuntamiento de València, Juan Manuel Badenas, durante la celebración del pleno municipal de este martes, en el que, entre otros puntos del orden del día, se incluía la aprobación de las subvenciones nominativas así como de una nueva modificación de créditos de La Mostra de València. Si bien los puntos salieron adelante, el partido no solo votó en contra sino que puso negro sobre blanco su hoja de ruta con respecto al festival: “Debería desaparecer”.
“Consideramos que esta institución debería desaparecer en la medida en que es, como se suele decir en el argot habitual, un chiringuito que sirve simplemente para la colocación de determinadas personas”. En estos términos se expresó Badenas durante su intervención en el pleno, aunque no desarrolló la cuestión. Por su parte, desde la bancada socialista han afeado al de Vox sus declaraciones, “manifestando nuestro apoyo a los creadores y cineastas que forman parte de la Mostra de València este año”, especialmente, indicó Maite Ibáñez, a la directora marroquí Sofía Alaoui. Cabe recordar que el festival fue recuperado en el año 2018 tras años sin celebrarse, una nueva etapa centrada en el cine del mediterráneo que en esta edición –que se celebra del 19 al 29 de octubre- contará con la presencia del director Paolo Sorrentino, que recibirá la Palmera de Honor 2023.
Sobre el proyecto cultural de Vox, en realidad, hay más preguntas que respuestas, pues ni el programa electoral local ni el programa autonómico contenían medidas al respecto, un 'vacío' que ahora se va despejando con los primeros anuncios por parte del ya ahora Conseller de Cultura Vicente Barrera y, también, por una tarea de oposición en lo local que se aleja de cualquier idea de "socio". Esta, pues, parece ser la tónica en el área de Cultura. De hecho, hace dos semanas se celebró el Consejo Rector de La Mostra, en el que salieron adelante los puntos del día pese a la oposición de Vox, que votó en contra de distintos puntos, como el protocolo de prevención de agresiones sexuales, que fueron aprobados gracias a la alianza del gobierno popular con PSPV y Compromís.
“No sabíamos que Vox iba a votar en contra, pero en este caso encontramos consenso con el resto de grupos, PSOE y Compromís, y ha salido todo adelante. Vox, por lo que me han dicho, ha seguido la tónica de la anterior legislatura, en la que votaban en contra de todo, supongo que por norma, no porque estén en contra”, reflexionaba el concejal de Cultura, José Luis Moreno, en una reciente entrevista con este diario. Este choque no solo está presenta en La Mostra, sino que también queda patente en otros espacios, como el Palau de la Música.
El auditorio, cuya reapertura está prevista para la próxima semana, celebró hace algunos días un Consejo de Administración que, en este caso, contó con la abstención de la secretaria autonómica, Paula Añó, siendo que en el gobierno autonómico no solo Vox comparte gobierno con el PP sino que, además, ostenta la batuta del área. “Entiendo que ellos estén esperando algo, algún gesto... es lo que he entendido de estas dos reuniones”, subrayó Moreno, quien admitió que hasta el momento ha mantenido una reunión Añó así como con las direcciones generales aunque, admitió, se trataron de encuentros centrados en lo urgente, que no fueron más allá de “líneas generales”.