VALÈNCIA. La EMT de València ha decidido recurrir la sentencia del Juzgado de lo Social número 1 que daba la razón a la ex directiva despedida por el fraude de cuatro millones de euros, Celia Zafra, y declaraba improcedente su cese. Así pues, de entre las tres opciones que contaba la empresa municipal tras el fallo, readmitirla, indemnizarla con 199.000 euros o recurrir el fallo, la firma que preside Giuseppe Grezzi ha optado por la tercera al considerar, según el comunicado remitido por la mercantil, "que la ex directiva incumplió con su deber de confidencialidad y custodia de la documentación de la empresa".
En el fallo que ahora recurre la EMT, a juicio de la jueza, "no parece razonable, ponderado, ni ajustado al criterio de proporcionalidad" el despido como castigo impuesto por la empresa -"la máxima sanción"- a una empleada que ha trabajado en la firma más de 40 años "sin haber incurrido en ninguna infracción". Por ello, considera la jueza que "el empresario -la EMT- se ha excedido en el ejercicio de la facultad sancionadora".
La carta de despido se fundamentaba en que Zafra había dado acceso a los estafadores a las firmas de los apoderados de las cuentas de la EMT y facilitó así su falsificación. Pero la jueza deja claro que Zafra es una perjudicada más del engaño: "simplemente se limitó a cumplir fielmente los requerimientos que recibió por parte de quien suplantaba la identidad de sus superiores" y, por tanto, no hubo voluntariedad por su parte para con el fraude. De ahí que la sentencia considere que no hay culpabilidad alguna, y cita una sentencia similar en otro caso de la estafa del CEO -así se llama esta estrategia de fraude- producida en Madrid.
Por ello, entre otras cosas, declaraba el despido como improcedente. En su recurso ante el Tribunal Superior de Justicia, la EMT alegará que se ha producido un error en la valoración de la prueba documental ya que, independientemente de poder haber sido engañada y que el negocio fuera real o una estafa organizada, la ex directiva envió documentación sobre la que estaba obligada al deber de custodia.
Además, insiste la empresa, la directiva ocultó inicialmente esta información relevante para el esclarecimiento de los hechos a la dirección de la empresa. De hecho, esta documentación que envío la exdirectiva fue imprescindible para que los estafadores llevasen a cabo el hecho delictivo. Este es otro de los aspectos que desmonta el fallo que se va a recurrir: que la directiva había ocultado dos correos enviados durante el fraude a la abogada de la empresa.
En este caso, la magistrada señalaba, simplemente, que uno de ellos no se ocultó, porque se hace referencia explícita al mismo, y el otro se imprimió con los otros 30 o 40 correos electrónicos cruzados con los estafadores. Al imprimirse este segundo no se adjuntó el fichero, pero "si el correo se imprimió, no cabe duda de que el mismo ya señalaba el envío del citado documento". El presidente de la EMT, sin embargo, insiste en que "independientemente de la sentencia, reiteramos que fue un acto negligente y de ahí nuestra decisión".
El PP en el Ayuntamiento de València ha pedido este miércoles que el alcalde, Joan Ribó, y el presidente de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) y concejal de Movilidad Sostenible, Giuseppe Grezzi, paguen "de su bolsillo" el gasto que supondrá recurrir la sentencia que declara improcedente el despido de la exdirectora de Administración de la entidad, Celia Zafra, a partir del fraude de 4 millones de euros detectado en la empresa.
En la misma línea, el grupo municipal de Cs ha censurado que se trate a los valencianos "como si fueran cajeros automáticos". Ambas formaciones se han pronunciado de ese modo después de que el consejo de administración de la EMT haya decidido recurrir dicho fallo.
La portavoz del PP en el Ayuntamiento, María José Catalá, ha considerado "indignante" que Grezzi y el resto de representantes del gobierno local --PSPV y Compromís-- en el consejo de administración de la compañía y el alcalde hayan decidido recurrir esa sentencia. Los representantes del PP en el consejo de administración de la EMT, Carlos Mundina y Marta Torrado, han votado en contra de la decisión.
Catalá ha censurado, en un comunicado, que se pretendiera usar a la exempleada "como cabeza de turco" tras la estafa y ha pedido que Ribó y Grezzi "paguen de sus bolsillos el gasto que supondrá el recurso". Ha reclamado así que "no salga ni un euro pagado por los impuestos de los valencianos" para afrontar ese gasto. "Si lo pagaran de su bolsillo, otro gallo cantaría", ha dicho.
En esta línea, los consejeros del PP en la EMT han solicitado que se acate la sentencia readmitiendo a la trabajadora despedida a partir del fraude y que no se gaste más dinero público para recurrirla "porque la magistrada deja muy claro que el despido es improcedente".
Asimismo, el PP ha censurado que los representantes del ejecutivo local hayan acordado consignar los 199.000 euros en los que se cifra la indemnización a la extrabajadora si no es readmitida y ha indicado que esto indica que "rechazan" la readmisión. "Como el
dinero no es de ellos, no reparan en la posibilidad de seguir incurriendo en más perjuicio económico para la EMT", ha planteado Catalá.
"No entendemos que el alcalde, que dice que en la jurisdicción social siempre se le da la razón al trabajador, ahora persista en presentar un recurso a sabiendas de que le vuelvan a dar la razón a la trabajadora. Lo que vemos es una gestión negligente del dinero público", ha agregado la portavoz 'popular'. Ha lamentado también "el menosprecio" del primer edil a los juzgados de lo social "cuando le han condenado por despedir improcedente de una trabajadora".
María José Catalá ha avanzado que su grupo estudiará "acciones legales contra esa gestión negligente de una sociedad que va a recurrir a sabiendas de que va a perder" e impugnar el acuerdo "de Compromís y PSPV de recurrir" el fallo, al no contar previamente los consejeros de la empresa con un informe jurídico que justifique esta decisión. El PP ha apuntado que quienes hayan respaldado la presentación del recurso "pueden haber incurrido en responsabilidad contable".
Por su parte, el portavoz de Cs en el consistorio, Fernando Giner, ha considerado, en alusión a la sentencia que declara improcedente el despido de Zafra, que el alcalde "trata a los valencianos como si fueran cajeros automáticos". Igualmente, ha criticado, en un comunicado, que en la EMT "se está actuando con una negligencia absoluta".
"Le recuerdo a Ribó que la EMT este año va a recibir más de 100 millones de euros por parte de los valencianos y ahora habrá que depositar otra fianza para recurrir una sentencia en la que la jueza deja bien claro que es un despido improcedente", ha expuesto el responsable de Cs.
Giner ha agregado que este es "un despido injusto que se produjo para tapar la mala gestión y las negligencias de Grezzi en el fraude de los 4 millones de euros".
"Lo que debía haber pasado es que Grezzi tenía que haber dejado de ser presidente desde hace tiempo. Ese dinero que Grezzi y Ribó quieren destinar a recurrir la sentencia es dinero que no va a estar disponible para que por las mañanas haya mejores frecuencias de autobuses y que los valencianos y las valencianas no se tengan que aglomerar en las paradas o cuando suben al bus de la EMT", ha subrayado el portavoz de Cs.
Fernando Giner ha indicado al primer edil que "eso sí que es una competencia suya" y ha censurado que diga que "no hay dinero" cuando "la realidad es que lo está gastando donde no toca".