Este estudio señala la falta de productividad y valor añadido como una de las principales dificultades que atraviesa la economía valenciana
VALENCIA. El Consell Valencià de la Innovació (CVI) ha aprobado el informe de situación del Sistema Valenciano de la Innovación que señala los problemas de la economía valenciana actual y analiza la situación de la innovación en la Comunitat, para desarrollar el proyecto de una Agencia Valenciana de la Innovación (AVI), que se tramitará al grupo parlamentario de Les Corts.
Este informe, a encargo del Consell Valencià de la Innovació, es uno de los pasos necesarios para poner en marcha la futura Agencia Valenciana de la Innovación, cuya ley de creación se encuentra en tramitación parlamentaria.
Según informa la Generalitat en un comunicado, este estudio señala la falta de productividad y valor añadido como una de las principales dificultades que atraviesa la economía valenciana. Asimismo, justifica que la innovación es un factor determinante para superar esta situación y, a su vez, mejorar la calidad del empleo, la renta per cápita y la sostenibilidad presupuestaria.
Para lograr una mejora del modelo productivo valenciano, el informe insta a desarrollar la "capacidad innovadora" de este, con el fin de lograr "un crecimiento inteligente, sostenible e integrador".
Para alcanzar este objetivo estratégico, los expertos recomiendan realizar un aprovechamiento efectivo del conocimiento generado en el conjunto del sistema de innovación, coordinando todos sus componentes y mediante el diseño de incentivos para garantizar su interconexión y cooperación efectiva.
Además, el informe aconseja la creación de un ente de coordinación, seguimiento y evaluación de la innovación. En lo que respecta a sus tareas, este nuevo organismo debe encargarse de promover el fortalecimiento y desarrollo del Sistema Valenciano de la Innovación, impulsando para ello la utilización del conocimiento disponible.
De acuerdo con el estudio, también debe concebirse como un "instrumento transversal de coordinación efectiva de la estrategia de innovación en la Comunitat Valenciana", con el objetivo de contribuir a conectar el sistema científico, tecnológico y financiero con el tejido productivo de una forma eficaz.
Los principales problemas estructurales del Sistema Valenciano de Innovación detectados por el Consell Valencià de la Innovació son un "insatisfactorio" nivel de inversión en I+D+i por parte de las empresas, además de una instrumentalización "descoordinada" de este tipo de políticas y la desarticulación.
En cuanto a la inversión en incorporación de conocimiento, se ha diagnosticado que el sector empresarial tiene en la Comunitat un peso relativo del 40,82% por debajo de la medio nacional, que es del 52,92%, y que, por contra, son las universidades las que realizan un mayor gasto en I+D+i. En el sector de enseñanza superior valenciano se invierte un 46,91% en investigación, desarrollo e innovación, frente al 28,13% que se gasta en España.
Destaca, a su vez, una escasa presencia de actividades intensivas en I+D en el sector manufacturero tradicional, con la excepción del azulejo, debido a que la especialización no ha penetrado lo suficiente en nichos tecnificados. En concreto, el valor añadido bruto de los sectores de alta y media tecnología de manufacturas de la Comunitat Valenciana sobre el total del sector es de un 24,35%, por debajo de la media española, de un 27,86% y de los valores de Cataluña, Madrid y País Vasco.
Asimismo se señala la caída del número de empresas innovadoras en el territorio valenciano, sobre todo a partir de finales de 2008 y 2009, con motivo de la crisis económica y la baja implantación de políticas de innovación en medianas y grandes empresas.
El segundo foco de problemas que identifica el informe de situación del Sistema Valenciano de la Innovación continua haciendo referencia a las políticas en materia de I+D+i, un ámbito en el que detecta una "instrumentalización descoordinada e insuficiente". Los expertos apuntan que existe, además, una "dispersión institucional" en este tipo de políticas que, por otro lado, tienen una "débil conexión" con otras políticas públicas. Asimismo, el estudio denuncia un "escaso desarrollo" de los instrumentos financieros específicos de apoyo a la innovación.
La débil interconexión entre los agentes del Sistema Valenciano de la Innovación, sumada a la escasa articulación entre ellos y a la poca producción científica y generación de patentes, da lugar a otro de los problemas señalados por el Consell Valencià de la Innovació: la desarticulación.
i se comparan las patentes por millón de habitantes por comunidades autónomas y países, la Comunitat, con 98,3 patentes, se encuentra por debajo de la media española, con 98,8, y también es inferior a los datos de otras comunidades autónomas, como Navarra (218), País Vasco (158) y Aragón (155) y tiene tasas muy inferiores a las de países como la República de Corea (3.185), Japón (2139) o Estados Unidos (909).