VALÈNCIA. Más de 13 millones de euros ha conseguido recaudar el Ayuntamiento de València por multas de tráfico, la ORA -conocida popularmente como 'zona azul'- y por impuestos municipales a cuyo pago podían escapar hasta no hace mucho los residentes de otros municipios. El trabajo conjunto entre la concejalía de Hacienda de València y la Agencia Tributaria Valenciana (ATV), dependiente de la Conselleria de Hacienda de la Generalitat, ha conseguido que ya no se pueda escurrir el bulto de estas obligaciones por no estar empadronado en la ciudad.
Hace cinco años, ambas administraciones aprobaron un convenio de colaboración en materia de embargos por sanciones de tráfico y ORA. Entonces, el organismo autonómico era el Instituto Valenciano de Administración Tributaria, y desde 2019, es la AVT dirigida por Sonia Díaz. El objetivo era poder realizar embargos en las cuentas bancarias abiertas en entidades de fuera de la capital del Túria y que tuviesen pendiente de pago el importe de las sanciones impuestas en València.
Hasta ese momento, el Ayuntamiento de València no podía llegar a los infractores en materia de tráfico o de la zona azul que tuviesen sus cuentas bancarias fuera de València, por lo que muchas multas quedaban sin cobrar. Y este convenio habilitaba a la Generalitat a pedir información a entidades financieras y autorizar solicitudes de embargo para reclamar el pago de sanciones cuando deban realizarse fuera del término municipal.
Así, la administración municipal, con la ayuda de la ATV ha podido reclamar ese dinero. Ahora bien, en principio sólo se circunscribía a multas de tráfico e impagos de la ORA. Pero desde este año, la colaboración se ha ampliado al resto de impuestos, tasas y otro tipo de gravámenes municipales.
Así pues, desde que se pusiera en marcha esta herramienta, la Agencia Tributaria ha permitido al Ayuntamiento recuperar 13.042.187 euros por estos conceptos que, de no existir el convenio, hubieran quedado sin ingresar en las arcas municipales. Según los datos registrados por la Agencia, el primer año se recuperaron más de 520.000 euros, pero la cantidad ha crecido considerablemente.
Al año siguiente, sin ir más lejos, la maquinaria ya funcionaba a pleno rendimiento y consiguió una recaudación récord de más de 3,3 millones de euros. Si bien se ha moderado el importe embargado desde entonces, bajando a los 2,9 millones en 2019; a 1,4 el año de la pandemia; y a 2,4 millones en 2021. Durante este año, durante el primer semestre, la cifra se ha incrementado hasta los 2,3 millones de euros, así que se espera un volumen de cuantías embargadas todavía mayor al acabar el año.
Para realizar todas estas gestiones, la Agencia Tributaria incurre en gastos de funcionamiento, de manera que parte de lo recaudado queda en el organismo autonómico. Según sus propios datos, el 93,7% de las cantidades recuperadas ha ido directamente al ayuntamiento, quedando el resto para las gestiones, funcionamiento y mantenimiento de los sistemas informáticos de la Agencia.
Desde la ATV, la directora general, Sonia Díaz, cree “muy positivo” el desarrollo del convenio para ambas administraciones “ya que con este sistema se acaba con situaciones de impunidad”. “Ahora con la recaudación de tributos, impuestos y otras sanciones por parte del consistorio todos los ciudadanos con independencia de su lugar de residencia cumplen con sus responsabilidades fiscales y con las normas municipales".
Además, subraya, "el dinero revierte directamente en mejoras para los ciudadanos y ciudadanas de València". Y en ese sentido "la colaboración en esta materia ha permitido garantizar la igualdad de los ciudadanos y reforzar la seguridad". "La justicia fiscal implica que todos los ciudadanos, residan donde residan sean tratados por igual", concluye la directora.