VALÈNCIA. La gestora valenciana Dasha Living Space, dedicada a alquileres de media estancia, suma y sigue ampliando su cartera con la explotación de un nuevo edificio en València. La compañía, de la familia valenciana Boix Ruiz, expropietaria de la aseguradora de decesos Finisterre, operará así el que será su sexto activo en la ciudad que, como en ocasiones anteriores, destinará al alquiler para profesionales que vienen a València por motivos laborales con estancias medias de hasta seis meses.
En concreto, el nuevo inmueble se ubica en la calle Compromiso Caspe 6, en el barrio de Patraix. El inmueble es propiedad de la constructora valenciana Edicover, que ejecutó la obra y concibió el proyecto como build to rent, es decir, para alquiler. Las obras de construcción ya han culminado, por lo que Dasha Living Space lo empezará a explotar próximamente y durante un periodo de cinco años, según se ha fijado en el contrato. El edificio cuenta con seis viviendas de tres habitaciones.
Con esta operación, la gestora valenciana sigue su hoja de ruta de crecimiento y alcanza así las 135 camas bajo gestión. Pero quiere ir más allá porque su objetivo es aumentar sus activos en explotación de cara a finales de año. De hecho, ya están en negociaciones para operar un nuevo inmueble en València de 14 viviendas. "Seguimos con nuestra estrategia de captación de edificios de patrimonialistas y estamos ultimando una nueva operación", asegura el CEO de la firma, Jesús Boix.
El perfil al que se dirigen sus alquileres son los profesionales desplazados, un segmento que sigue al alza en la ciudad. No solo por su clima y calidad de vida, sino que ahora hay otro motivo: el precio de la energía. Según explica Boix, han detectado una fuerte demanda de ciudadanos del norte de Europa que vienen a la ciudad por sus menores costes energéticos y ante la posibilidad de teletrabajar.
"Ante el incremento del precio de la energía están llegando muchos alemanes, franceses, holandeses y daneses que están bajando a España para reducir sus costes", apunta. Y es que la mayoría de sus clientes son extranjeros que deciden ubicarse en la Capital del Turia por necesidad laboral y que suelen estar entre tres y seis meses. "En nuestras viviendas de una habitación la media de la estancia ronda los tres meses y los pisos que tenemos más grandes, de hasta tres habitaciones, es de seis meses. Nosotros no ofrecemos una oferta de alojamiento turístico", recalca.
Pero, además de contar con un portfolio de edificios en explotación, Dasha Living Space también gestiona inmuebles individuales de terceros, que suman unas 20 viviendas en diferentes puntos de la ciudad. "Nuestro objetivo es llegar en 2023 a las 100 viviendas en gestión siempre destinadas a profesionales desplazados que es nuestro nicho de mercado", subraya.
Constituida en 2016, la gestora valenciana cuenta ya con seis edificios en València con una cartera total de 71 viviendas en explotación y una oferta total de 135 camas. Aunque la compañía está centrada en el alquiler temporal, su primera promoción fue el denominado edificio Marqués de Cruilles en el número 105 de la calle Cuenca, el único que, por el momento, han destinado a la venta.
El resto de su oferta se ha centrado en el alquiler para un perfil profesional. Uno de ellos se encuentra en pleno corazón de València, en la calle Cádiz 40 en Russafa, y está formado por diez viviendas, que compraron en 2015 a la entidad Ruzafa Park SL. En la misma zona, pero en la calle Cuba 16, tienen un edificio que compraron hace un año y que tuvieron que rehabilitar, entrará en funcionamiento en enero de 2023. Cuenta con ocho viviendas y las obras siguen en marcha.
Otros tres inmuebles se encuentran en el casco antiguo de la ciudad. Uno de ellos, promovido por ellos bajo la fórmula del build to rent, se sitúa en la calle Huertos, justo enfrente a la falla de Na Jordana, y consta de 9 inmuebles. También en El Carmen, en la calle Turia, frente al Jardín Botánico, tienen otro edificio de diez viviendas y otro más, de seis viviendas, en la calle Alta número 36.