VALENCIA. El concierto de la Conselleria de Sanidad con la UTE Erescanner Salud, que cede a esta unión temporal de empresas controlada por Eresa la gestión de las resonancias magnéticas en casi todos los hospitales públicos valencianos, está siendo revisado con lupa por la Sindicatura de Comptes y por la Intervención General de la Generalitat, por separado.
En el caso de la Sindicatura, se trata del segundo informe sobre este asunto, tras la demoledora auditoría realizada en 2013 que destapó numerosos incumplimientos del contrato firmado en 2008. Aquel informe, firmado por el auditor Miguel Olivas, concluía que había una casi absoluta falta de control por parte de las autoridades sanitarias y que si el servicio lo prestase la Conselleria con sus propios medios conseguiría un ahorro anual de entre 3,3 y 16,7 millones de euros.
El organismo que dirige Rafael Vicente Queralt ultima un nuevo informe cuya publicación está prevista para el primer trimestre de este año, según fuentes de la Sindicatura. En concreto, según figura en el programa de actuaciones de 2016 remitido a las Corts, realizará un "seguimiento de la auditoría operativa de resonancias magnéticas y de los conciertos de hemodiálisis", es decir, un trabajo para comprobar el grado de cumplimiento de las recomendaciones del primero.
El informe de 2013, titulado Resonancias magnéticas: una oportunidad de ahorro. Auditoría operativa de conciertos sanitarios: evaluación con criterios de eficiencia, eficacia y economía de la gestión del concierto de resonancias magnéticas, recibió el segundo premio de los galardones anuales que concede la revista Auditoría Pública a trabajos de fiscalización de la Administración.
Al mismo tiempo, según ha podido saber Valencia Plaza, la Intervención General de la Generalitat está investigando el funcionamiento del concierto de Sanidad con la UTE Erescanner Salud, controlada por el grupo Eresa, en la que participan Inscanner, Ribera Salud y Beanaca.
Unas y otras auditorías coinciden en el tiempo con la investigación que lleva a cabo un juzgado de Valencia a la empresa Exploraciones Radiológicas Especiales (Eresa), por presuntos fraudes tributario y de subvenciones. En la causa están imputadas 13 personas de Eresa, entre ellas su principal accionista, Vicente Saus, y sus hijas Marta y Lorena, que ya han declarado.
Eresa también fue objeto de una causa judicial por presunto fraude en la facturación de resonancias magnéticas a la Conselleria y por presuntas coacciones a un empleado que había confirmado el fraude, que fue sobreseída por la jueza de Instrucción número 8 de Valencia sin practicar ninguna diligencia, según se quejó entonces el abogado del trabajador.
Tras estas primeras investigaciones, la propia empresa pidió públicamente a la Genralitat que realizara una auditoría de su facturación a la Conselleria de Sanidad, mientras que tanto la consellera Carmen Montón como la vicepresidenta y portavoz, Mónica Oltra, anunciaron que fiscalizarían ese concierto y las concesiones hospitalarias.
En el programa de actuaciones de la Sindicatura de Comptes para 2016 figuran, además del nuevo informe sobre las resonancias, sendas auditorías de la gestión de compras de la Conselleria de Sanidad (fase II) y de la gestión de la nómina del personal docente, y dos más por determinar.
En cuanto a la Generalitat, realizará informes específicos sobre las sociedades Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales de la CV (Epsar), el Instituto Valenciano de Finanzas, la Entidad de Infraestructuras de la Generalitat y fiscalizaciones especiales sobre la Agencia Valenciana de Fomento y Garantía Agraria, Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana, Cacsa, CulturArts, la Fundación Palau de les Arts, la Fundación Hospital La Fe y los consorcios Hospital General de Valencia y Hospital Provincial de Castellón.
En el ámbito local, además de los informes sobre ayuntamientos de más de 25.000 habitantes, se fiscalizarán las cuentas de 2014 de los siguientes ayuntamientos: Moncada, Riba-roja de Túria, Tavernes Blanques, Bellreguard, Albalat dels Sorells, Vallada, Favara, La Jana, L’Orxa, Gátova, Castelló de Rugat y Loriguilla, y se finalizará la fiscalización del Ayuntamiento de Navajas, Ayuntamiento de Almenara y Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (Emshi).