César Augusto Tauroni, a la salida de la Ciudad de la Justicia. Foto: KIKE TABERNER VALÈNCIA (EP). La jueza del juzgado de Instrucción número 21 de València ha pedido a la Policía un informe para comprobar si el empresario Augusto César Tauroni, que cumple prisión por la primera pieza del caso Cooperación, utilizó un ordenador con acceso a internet desde la prisión de Picassent con el fin de ocultar su patrimonio.
Asimismo, la magistrada instructora ha ordenado el volcado del disco duro del ordenador que usó en prisión Tauroni, condenado a seis años de prisión por el desvío de ayudas de la Generalitat al Tercer Mundo.
Así consta en una providencia, facilitada por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, en la que se señala que, en relación con la pieza cuarta de esta causa, la jueza tiene por personada a la Abogacía de la Generalitat como acusación particular y a la Coordinador Valenciana de organizaciones No Gubernamentales en calidad de acción popular.
En su resolución, la magistrada acuerda recabar un informe pericial del grupo de informática forense de la Policía Científica "en orden a comprobar si el investigado utilizó el ordenador accediendo a internet con la finalidad de ocultar su patrimonio, bien mediante rastreo de páginas web a las que pudo tener acceso, cuentas de correo o cualquier información de interés reveladora de la existencia de depósitos dinerarios o patrimonio oculto".
Asimismo, acuerda que el volcado del disco duro se realice en dependencias de la Policía Científica, en la Jefatura Superior de Policía de València.
El pasado mes de marzo, la jueza abrió una pieza para investigar,tras ordenárselo la Audiencia, el uso que hizo Tauroni de un ordenador portátil que le intervinieron en Picassent, donde se encuentra cumpliendo condena.
Tauroni contaba con una autorización para utilizar un ordenador de Picassent, de la Unidad Docente, para facilitarle el estudio de la documentación que en formato electrónico --por su elevado volumen-- se había incorporado al caso Cooperación.
Con ocasión del traslado del empresario a un modulo distinto de la prisión, se hizo revisión del ordenador portátil y se descubrió que con el mismo era posible conectarse a internet y que se había utilizado indebidamente el acceso a la red existente en la Unidad Docente.
Tras conocerse este hecho, el fiscal pidió una investigación por si Tauroni había podido manejar desde este ordenador sus cuentas en el extranjero o había dado instrucciones a terceros sobre la disposición de su patrimonio.
Así mismo, alegó que Tauroni es un experto informático y que una de las líneas de investigación que se siguen en la causa es si su patrimonio en Estados Unidos proviene de adquisiciones relacionadas con los beneficios de los delitos de malversación y fraude de subvenciones que se le imputan.
La jueza declinó investigar este asunto al verse no competente y después la Audiencia le ordenó hacerlo al estimar que había indicios de la posible comisión de hechos delictivos más allá de la responsabilidad disciplinaria en que el interno hubiera podido incurrir.
