VALÈNCIA. El pasado mes de febrero, los teatros municipales de València inauguraron su nueva temporada con unos objetivos muy definidos: en el caso de La Mutant, consolidar la apuesta por las creaciones más innovadoras y la convivencia entre los distintos géneros; en el del TEM, ofrecer una propuesta donde la dramaturgia fuese la protagonista indiscutible. Sin embargo, la crisis sanitaria y el estado de alarma obligaron a la suspensión temporal de ambas programaciones, dando paso a una etapa de incertidumbre donde cualquier escenario era posible, desde la reactivación dentro de los plazos iniciales hasta la reubicación de eventos para la próxima temporada.
A lo largo de las últimas semanas, las dos salas han querido mantener activa una pequeña parte de su oferta cultural a través de las plataformas digitales (como el taller Des del barri, coordinado por Anna Albaladejo e Isabel Caballero), mientras continúan buscando nuevas fórmulas para mantener a los espectadores “conectados” durante el confinamiento y tratan de adecuar las obras suspendidas dentro del último cuatrimestre de 2020. Junto a ellas, algunos certámenes que iban a desarrollar la totalidad o parte de su programación en el TEM y La Mutant esperan concretar nuevas fechas para confirmar su presencia en la próxima temporada de los teatros.
Hasta ahora, el último encuentro de La Mutant con su público tuvo lugar el 7 de marzo, con el concierto conmemorativo del Día Internacional de la Mujer. En el TEM, la última representación fue Flam, de Roger Bernat, ese mismo día. Desde entonces, el silencio escénico no ha impedido que los responsables de las salas trabajen en reubicar los espectáculos afectados por el cierre, convirtiendo así las suspensiones en aplazamientos. De este modo, si la situación sanitaria lo permite, La Mutant acogerá en septiembre los festivales Pops Marítims (días 11 y 12) y 10 Sentidos el día 20 (este último también en el TEM el 25 y 26), mientras que piezas como La vaca que riu (13 y 14 de noviembre) o Pèls de colom (18, 19 y 20 de diciembre) han encontrado ya acomodo en los meses finales del año. Por su parte, el TEM ha pospuesto para septiembre espectáculos como Los días ajenos de Bob Pop (día 6), el recital de flamenco a cargo de Israel Fernández y Diego el Morao (día 27), o la II Fira d´Associacions d´Arts Escèniques Valencianes (días 18 y 19). Fairfly, la obra de la compañía La Calórica que en un principio iba a ser la siguiente tras Flam, ha confirmado su presencia para el mes de noviembre (día 1).
A pesar de las incógnitas que se desprenden de la actual situación, la coordinadora artística de La Mutant, Marta Banyuls, mantiene la esperanza de poder representar todavía algunos espectáculos dentro del margen previsto, o incluso apurando hasta principios de julio, como es el caso de Club Mutante (del 8 al 11). “La intención de mantener las fechas y hacer las representaciones antes de septiembre serviría para dar salida a las propuestas afectadas y permitiría a las compañías disponer de liquidez lo antes posible”, señala Banyuls. “La esperanza es poder llevar a cabo algunas actuaciones, aunque sea con aforo limitado. Si finalmente no fuese posible, pasarían a programarse dentro del último cuatrimestre del año”.