VALENCIA (VP). Quabit Inmobiliaria ha concluido 2015 con un beneficio neto de 21,7 millones de euros. La mejora del resultado neto se explica fundamentalmente por el impacto positivo de las quitas de deuda asociadas a su cancelación parcial (54,1 millones de euros); y, en menor medida, por la activación parcial de créditos fiscales (5,2 millones de euros).
Además, tras los acuerdos de reestructuración alcanzados con las entidades financieras, está previsto para los próximos años un descuento de 53 millones de euros sobre la deuda. Asimismo, a cierre de 2015 estaba pendiente la activación de créditos fiscales por importe de 183 millones de euros, lo que supone un importante activo y una gran fortaleza para la compañía.
La suma de todos estos activos permitirá a Quabit generar resultados positivos en próximos años, si bien es importante destacar que tanto la generación de facturación como la obtención de resultado operativo se irá produciendo gradualmente conforme vayan avanzando los proyectos residenciales cuyo periodo de maduración medio es de 24-36 meses.
Por primera vez en la historia de la compañía, Quabit Inmobiliaria tiene previsto repartir dividendo (en acciones) entre sus accionistas. “Durante todos estos años -explica el presidente, Félix Abánades- hemos trabajado muy intensamente para asegurar la viabilidad de la compañía. El año 2015 ha sido determinante para el futuro de Quabit y ahora tenemos la oportunidad de volver a crecer. Este éxito se debe en gran parte al apoyo y a la confianza continua de nuestros accionistas. Y por todo ello, el consejo de administración quiere reconocerles su apoyo a la gestión y a las expectativas de crecimiento de Quabit”.
Para ello, el consejo de administración propondrá a la aprobación de la junta general de accionistas la realización de una ampliación de capital con cargo a reservas en la proporción 1 acción nueva por cada 20 antiguas.
Quabit Inmobiliaria ha cerrado 2015 con una estructura financiera consolidada y una situación patrimonial saneada. La deuda bancaria se ha reducido en un 31,2% con relación a la existente a 31 de diciembre de 2014, hasta situarse en 234,2 millones de euros.
Con la materialización de los acuerdos de cancelación de deuda firmados, esta cantidad se reducirá en 116 millones de euros más tras la aplicación de las quitas y las entrega de activos previstas; hasta ajustar la deuda en 110 millones de euros, de los que el 80% tiene vencimiento a partir de 2019.