VALÈNCIA. La nueva ministra de Sanidad, Carolina Darias, debutó este jueves en las reuniones del Consejo Interterritorial, en el que participan el Gobierno de España, las Comunidades Autónomas y la Federación Española de Municipios y Provincias, en un momento delicado debido a las altas cifras de contagiados y fallecidos que marca la pandemia.
La espantada de su predecesor Salvador Illa en dirección a las elecciones catalanas no parece haber supuesto, a tenor de la primera intervención de Darias, un cambio de línea dentro del departamento: rechazo al toque de queda u otras medidas que impliquen modificar el estado de alarma, mensaje tranquilizador y optimista -dentro de las posibilidades- y cierto aroma a falta de transparencia y claridad en varias de sus respuestas.
Así, si Illa se marchó asegurando que desde el ministerio estudiarían la posibilidad de adelantar el toque de queda tal y como solicitaban muchas CCAA, entre ellas la valenciana, Darias continuó la senda marcada por su compañero para indicar que los gobiernos regionales todavía disponen de margen dentro del actual marco para adoptar más restricciones. Un discurso que se vio apoyado por el director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, quien mantuvo su habitual tono sosegado para mostrar su capacidad de ver el vaso medio lleno ante un escenario en la que apenas quedan unas gotas de paciencia.
Respecto a la vacunación, ni Darias ni Simón se aventuraron a concretar si cabe la posibilidad de que llegue una remesa extra de vacunas Pfizer en los próximos días ni tampoco si acometerán alguna redistribución para evitar el aplazamiento de la administración de la segunda dosis a muchos sanitarios en el plazo de 21 días. Como informó Valencia Plaza este jueves, estos aplazamientos ya se están produciendo, por ejemplo, en la Comunitat Valenciana. La 'solución' planteada por ambos responsables políticos ante la falta de vacunas para completar a tiempo la pauta se centró, precisamente, en minimizar el problema de un retraso en la segunda dosis: la ministra habló de 5 o 6 días y Simón lo alargó hasta los 42 días desde la primera inyección.
En este sentido, cabe recordar que lo estipulado en la ficha técnica de la vacuna apunta a 21 días entre la primera y la segunda dosis. Los expertos, así lo corroboran los técnicos de la Conselleria de Sanidad, consideran que lo idóneo sería acatar estos plazos o excederse en un par de días a lo sumo para no perder la potencialidad de la segunda dosis. Aunque en la ficha técnica de la vacuna se menciona que en las pruebas se esperó en algunos casos hasta los 42 días, Pfizer se ha desmarcado a la hora de certificar la eficacia con un espacio tan diferente de lo que marca su prospecto, ya que, justifica, solo probó la eficacia de la vacuna con la distancia de 21 días entre las dos dosis.
Este retraso en la segunda dosis da un respiro a la Conselleria de Sanidad, que se enfrentaba a un serio problema la semana del 1 al 7 de febrero al tener que vacunar a unas 48.000 personas y apenas contar con las 34.000 dosis que recibirá el día 1. El día 8 se prevé que lleguen otras 34.000. El departamento que dirige Ana Barceló frenó hace días la administración de primeras dosis de la vacuna de Pfizer para destinar todas las existencias a segundas dosis.
Por otro lado, Simón fue preguntado por la situación concreta de la Comunitat Valenciana, que lidera la incidencia de España en lo que se refiere a contagios por cada 100.000 habitantes con 1.438.
El doctor admitió no poder profundizar en las causas del incremento meteórico acontecido en las últimas semanas en la Comunitat, si bien apuntó a la incidencia en "puntos concretos" de la cepa británica. Confesó no disponer de cifras detalladas sobre todo el territorio. No obstante, el director de Emergencias, incidió en que los datos de los últimos días de la Comunitat Valenciana apuntaban a una "suave desaceleración".
En cuanto a la mencionada variante británica, Simón aseguró que ya representa en España entre el 5% y el 8% de los nuevos casos de contagio, aunque existe "mucha variabilidad" entre comunidades autónomas y territorios, en los que representa "más del 20%"..
Por ello, recalcó, se espera que esta cepa pueda ser predominante a finales de febrero o primera quincena de marzo. Finalmente, Simón informó de que sólo se ha identificado en España un caso de la variante sudafricana y ninguno de la brasileña.