VALÈNCIA. Las treintena de cajas rurales domiciliadas en algún punto de la Comunitat Valenciana -18 del Grupo Cooperativo Cajamar y 13 independientes- presentaron un beneficio conjunto de 21,18 millones de euros durante el pasado ejercicio, lo que representa un descenso del 12% respecto a los 4,05 millones cosechados durante el pasado ejercicio. Así lo revelaron los números individuales colgados ayer en la base de datos pública de la Unión Nacional de Cooperativas de Crédito (UNACC).
De las 33 cajas rurales valencianas solo una registró directamente pérdidas y, además, fue la única de todas las repartidas por el territorio nacional. Se trata de La Vall San Isidro de Vall d'Uixó, que presentó números rojos por valor de 3,28 millones de euros frente a unas ganancias de 611.000 euros en 2015 . Este diario se puso en contacto con dicha entidad ayer por la mañana para conocer el por qué de tales pérdidas, pero no logró obtener respuesta alguna. Sí que la tuvo desde la UNACC para confirmar que el dato era correcto. Todo apunta a que detrás están unas mayores dotaciones y provisiones.
El resultado de la entidad de la comarca de la Plana condicionó no solo el balance conjunto de la treintena de cooperativas valencianas especialmente las que acaban de constituirse la Asociación Valenciana de Cooperativas de Crédito (AVCC). Así, mientras a lo largo de 2015 lograron un beneficio conjunto de 20,57 millones de euros, prácticamente un 20% más que el ejercicio anterior, el pasado año vieron como disminuía un 11,23% hasta los 18,26 millones.
Caixa Popular presentó esta vez el mayor avance en términos absolutos, al ganar 1,47 millones más en 2016 hasta los 6,20 millones según los mismos datos individuales recogidos por este diario de la web de la Unión Nacional de Cooperativas de Crédito. La otra gran cooperativa independiente Caja Rural Central de Orihuela recortó su beneficio un 8,43% hasta los 6,92 millones de euros.
Por su parte, las 18 cajas rurales autonómicas del Grupo Cooperativo Cajamar, que están repartidas por las tres provincias de la Comunitat Valenciana, redujeron un 16,15% el beneficio conjunto durante el pasado ejercicio hasta los 2,92 millones de euros.
Conviene recordar que hace dos años cambiaron el sistema de mutualización de beneficios, que hasta 2014 realizaban atendiendo a los activos totales medios y que desde entonces llevan a cabo en función de los fondos propios, “lo que ha provocado variaciones relativas en los resultados individuales que obedecen simplemente al cambio de criterio", reconocían hace un año fuentes cooperativistas consultadas por Valencia Plaza.
De todas formas no hay que olvidar que el Grupo Cooperativo Cajamar ganó un 8,4% en 2016 hasta los 76,1 millones de euros. Lo hizo gracias al incremento del margen bruto y margen de intereses -excluido 'carry trade'-, a pesar del entorno de tipos de interés en mínimos y de la debilidad del crédito. El grupo cuenta con 1.191 oficinas repartidas a través de 42 provincias españolas y dos ciudades autónomas; mientras el mayor incremento de su negocio se produjo precisamente en la Comunitat Valenciana, donde en 2016 concedió más de 1.000 millones de crédito y ya cuenta con un volumen de negocio superior a los 20.000 millones de euros, lo que representa un tercio del total de la entidad.
Las cooperativas de San Roque Almenara (+42,42%), La Junquera de Xilxes (+43,31%), San Isidro de Vilafamés (+25,93%) y San José de Vilavella (+5,45%) fueron las que presentaron avances más considerables dentro de este grupo consolidable, mientras que las de Petrer (-35,15%), San José de Burriana (-27,27%) y San Vicente Ferrer de L'Vall d'Uixó (-22,41%), fueron las que más redujeron su beneficio.
