VALÈNCIA. Que el último año ha puesto a prueba a los sectores culturales no es ninguna novedad. La pandemia pillaba desprevenido al mundo hace algo más de un año con una bajada de persiana generalizada que todavía escuece. Dieciséis meses después del primer golpe, sus profesionales siguen batallando, entre ellos los responsables de unas galerías de arte que han sido clave para mantener, no solo la programación, sino el espíritu de la ciudad de València. Mientras algunos grandes centros bajaban el ritmo de inauguraciones y en otros sectores era impensable volver a la normalidad, las galerías de arte contemporáneo brindaban el pasado Abierto València, evento con el que dan el pistoletazo de salida al curso, algunas de las mejores propuestas expositivas de la temporada, proyectos ilusionantes en un contexto todavía en tonos grises. El talento, la calidad y el esfuerzo están pero, ¿acompaña el mercado nacional e internacional? Ahora toca tomarle el pulso.
La feria de arte contemporáneo ARCO abrió de nuevo sus puertas el pasado miércoles en Madrid. Lo hace de manera excepcional este mes de julio, tras ser aplazada su celebración a causa de las restricciones sanitarias. No es ningún secreto que en los últimos meses los profesionales del sector han protagonizado un intenso debate sobre la idoneidad o no de celebrarla, especialmente cuando se prevé que la próxima cita regrese a sus fechas habituales, en febrero. La propia directora de ARCO, Maribel López, no ha escondido que este año no esperan batir récords, aunque sí ha dejado claro un mensaje: la intención de celebrar la feria es ayudar a las galerías. El ambiente, como es lógico, es algo diferente. Menos galerías, compradores… pero sí una palabra en la boca de todos: resistencia. Y en esa resistencia artística también están las galerías valencianas, representadas por Luis Adelantado, Rosa Santos, House of Chappaz (anteriormente conocida como Espai Tactel) y, como novedad, Set Espai d’Art.
Para la galerista Reyes Martínez este es un año bien especial. El buen hacer de Set Espai d’Art la ha llevado, tras años de intenso trabajo, a estrenarse este 2021 en ARCO. Y, quizá por esto, las contradicciones se subrayan más que en otros casos. “Participamos con ilusión y también un poco de miedo, porque económicamente es duro para las galerías. Pero tenemos muchas ganas de movernos de que nos vean”, relata en conversación con Culturplaza. Hay menos compradores, sí, pero también han podido acceder a un stand mucho más vistoso este año, un espacio que le ha permitido desplegar sus cartas en una feria que es mucho más que eso, una cita que supone un punto de inflexión para el futuro inmediato de la galería. Esta oportunidad sabe a premio por el trabajo bien hecho y, también, a segunda oportunidad tras un año en el que tantos proyectos artísticos han quedado deslucidos por la pandemia.
“Hemos hecho grandes proyectos en la galería que se han visto poco. Por ejemplo, con Ana H. Del Amo participé en Abierto Valencia, luego fue al Museo de Cáceres, con otro repunte en la pandemia, en el que yo no pude ni viajar… de repente ahora lo puedo mostrar. Se lo merecía. Siendo mi primer año quería montar el mejor stand posible”, relata la galerista. El proyecto de Ana H. Del Amo plantea un juego con diferentes tradiciones artesanas, un trabajo que se hila perfectamente con el de los artistas con los que comparte espacio, un stand en el que cada uno tiene su lugar pero en el que todos van a una. Y es que también Arancha Goyeneche tira de tradición con un proyecto que surge de la admiración de la artista por los azulejos hispanomusulmanes, mientras que la china Chingsum Jessye Luk trabaja sobre los materiales encontrados y recuperados. Como guinda la galería muestra una selección de fotografías vintage de Leo Matiz, realizadas en esa Colombia que serviría de inspiración a Gabriel García Marquez.
“Parece que empezamos a ver el final del túnel […] Es el principio de una posible vuelta a la normalidad”. Estas palabras las firma Ismael Chappaz, que acude por primera vez a ARCO bajo la marca House of Chappaz. Esta es la nueva aventura del galerista tras más de una década operando desde Espai Tactel, un nuevo proyecto que tiene parte de renovación y parte de continuación. Bajo esta marca aglutina los proyectos hasta ahora capitaneados en València, con Espai Tactel, y en Barcelona, de la mano de Toormix, e integra un nuevo pilar, The Blink Project, la galería impulsada por María Tinoco que a partir de septiembre pasa a ser sede de House of Chappaz.
Tras meses de trabajo llegan a un Madrid del que esperan mucho y lo hacen de la mano de una nómina de artistas que les asegura recibir más de una visita, con nombres de la talla de Antonio Fernández Alvira, Momu & No Es, Guillermo Ros y Carlos Sáez y con un proyecto especial de Carmen Ortiz. Por cierto, para quien se quede con las ganas de más, el próximo mes de octubre Ros inaugurara en el Institut Valencià d’Art Modern (IVAM) la exposición Un exercici de violència. “Es una ARCO extraña en un momento extraño, pero ni tan mal. Las ferias son necesaria para el sector, para la galerías y el tejido cultural español. Y, sobre todo, para generar un diálogo con el extranjero. ARCO es la gran feria legitimadora: si estás, existes; si no estás, no”, explica el galerista, quien defiende el sector no tanto desde el cascarón sino desde el contenido: “Hay que generar son los proyectos desde la entrañas y demostrar que esto no sólo es un juego de nuevos ricos aburridos. El mundo del arte es algo muy serio”.
Otra de las galerías que no falla en ARCO es Luis Adelantado, todo un referente valenciano desde hace ya 35 años. Habla la galerista Olga Adelantado de expectación, de retos y, también, de optimismo, una combinación clave para afrontar una edición decisiva que tiene la vista puesta en “reconectar” con el sector. “No solo con coleccionistas, que por supuesto, también con artistas de la galería que hacía mucho no podíamos ver, y con comisarios y críticos. En definitiva, como el momento de volver a tejer contexto físico”, explica Adelantado quien, desvela a este diario, que el balance está siendo muy positivo, pues ya ha vendido obra tanto a colecciones como a particulares.
La galería ha viajado a Madrid con una propuesta de marcado carácter nacional y en el que tienen un espacio destacado los artistas valencianos, una cupo cubierto por Jorge Peris, Álex Marco y José Luis Cremades. Otros de los nombres destacados de la propuesta de Luis Adelantado son Irma Álvarez-Laviada o Rubén Guerrero, que ha elaborado una pintura ex profeso para esta edición. También han viajado a Madrid con una de sus figuras clave, Darío Villalba y sus Documentos básicos, material indispensable para comprender su trabajo. Su figura es indisociable de la galería, que hace apenas unas semanas inauguraba un proyecto comisariado por Sergio Rubira que buceaba en los orígenes de Luis Adelantado, una muestra acompañada por una nueva mirada a esta emblemática serie de trabajos de Villalba. Ambas, por cierto, se pueden ver hasta el 10 de septiembre.
Esta feria de ARCO nos habla del presente del mundo del arte, pero también del futuro, pues si algo ha hecho este año en hacernos preguntarnos cómo será el mañana. “La situación nos empujó a acelerar el proceso de digitalización y venta online que llevábamos tiempo desarrollando pero que nos costaba enfrentar. A mi personalmente me ha obligado a hacer un seguimiento aún más fuerte de mis clientes, que en realidad son amigos. En la desescalada, lo que espero es que todo ese esfuerzo de relaciones virtuales, alimente las próximas experiencias físicas. En cualquier caso, nuestros reto ahora sería maximizar y complementar la experiencia online con la física y viceversa”, recalca Olga Adelantado.
También ha viajado hasta ARCO la galería Rosa Santos, que desembarca en la feria de la mano de artistas como Chema López, Greta Alfaro o María Tinaut. Aunque, cabe destacar, este año le queda más cerca que nunca. Y es que el proyecto valenciano ha crecido este 2021 abriendo nueva sede en la capital. “Rosa sigue pensando en Valencia como cantera de las artistas que tiene en su galería. El proyecto tiene vocación de visibilizar a Valencia, a la galería y a sus artistas en otros circuitos”, explicaba Paula Noya de Blas a Culturplaza el pasado mes de mayo. Apunta, por su parte, la galerista Rosa Santos que la presencialidad es algo "deseado y necesario", un elemento clave en la experiencia del arte que ha hecho, más si cabe, echar de menos esas ferias que son mercado y punto de encuentro. "Esta edición de ARCO ha sido muy deseado por todos. Era fundamental volver a activarnos. El reencuentro ha sido muy positivo".
Luis Adelantado, Rosa Santos, House of Chappaz y Set Espai d'Art regresan en un año en el que se estrena la galería Jorge López, nuevo proyecto tras el cierre de Punto