ALICANTE. Según el Informe global sobre la brecha de género del Foro Económico Mundial (FEM), se tardará 132 años en corregir la brecha de género en todo el mundo. Tal y como publicaba recientemente este medio, esa desigualdad es patente a todos los niveles en el mercado laboral, a pesar de que se avanza para cerrarla, también desde la Comunitat Valenciana y la provincia alicantina. Este diario hace un análisis de las principales diferencias y trabas que se encuentran las mujeres en su vida laboral.
A nivel global, el 32,4% de los puestos de alta dirección de las empresas del mid-market lo ocupan mujeres, lo que supone un aumento de apenas un 0,5% desde 2022. Así lo refleja el informe 'Women in Business 2023. Un impulso hacia la paridad' de Grant Thornton. En este sentido, hay avances positivos en el porcentaje de mujeres en los equipos directivos de empresas de la Comunitat Valenciana. Son un 31% en el año 2023. La comunidad autónoma mejora sus resultados con respecto a 2022 en dos puntos, cuando había un 29% de mujeres en esas posiciones de toma de decisiones.
Son datos que, Soraya Muñoz, socia de Laboral de Grant Thornton, considera como "muy positivos". Afirma que la mayoría de las comunidades autónomas Habían continuado en 2023 "con la tendencia de crecimiento en el porcentaje de mujeres directivas" y, en concreto en la comunitat Valenciana "debemos proseguir en este avance y pedir nuevos pasos en materia de paridad en puestos directivos".
Así, la secretaria general de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), Esther Guilabert, explica a este diario que "el informe vuelve a situar a España entre los países que más han avanzado en el último año en materia de equilibrio de género en los puestos de responsabilidad de las empresas. Es una buena noticia, no obstante, aspiramos a más".
A este respecto, Guilabert expone que, pese que el avance profesional de las mujeres ha sido notable "seguimos necesitando de la educación y de los referentes femeninos para reducir las desigualdades y alcanzar la igualdad plena en muchos ámbitos, no sólo en el empresarial". Y mantiene que "hay que quitar miedos y empoderar a las potenciales emprendedora; aumentar la presencia femenina en sectores históricamente masculinos; poner sobre la mesa las dificultades para conciliar la vida laboral y familiar o hacer visibles las dificultades de las mujeres empresarias para obtener financiación".
De este modo, ha habido avances positivos en cuanto al porcentaje de mujeres en los puestos de alta dirección y los indicios apuntan a que este progreso podría recibir un impulso considerable por los cambios en los métodos de trabajo adoptados en todo el mundo desde la pandemia, según el estudio de Grant Thornton.
También han destacado la importancia de la creación de programas de apoyo y bienestar y el compromiso con la transparencia y la igualdad de oportunidades para aupar esas cifras. Sin embargo, el mismo informe destaca que "el hecho de que el progreso sea lento y de que incluso corra el riesgo de sufrir un retroceso demuestra la importancia y la urgencia de comprometerse a realizar acciones conscientes para aumentar el porcentaje de mujeres en la alta dirección".
Y no dejan atrás la necesidad de vigilar para que "estas medidas positivas para acelerar el progreso" no tapen "posibles consecuencias negativas para las mujeres". Las empresas del mid-market deben comprender las ventajas del trabajo flexible y, al mismo tiempo, protegerse frente a los posibles riesgos que podrían aparecer si no supervisan y gestionan adecuadamente sus efectos. También es necesario examinar de forma pormenorizada las repercusiones de los nuevos métodos de trabajo en la diversidad y la inclusión en general. "En el camino hacia la paridad, debemos asegurarnos de que nadie se quede atrás", explican.
En este marco, desde Grant Thornton, afirman que los cambios de la reforma laboral en España en materia de igualdad permiten avanzar en los derechos y las condiciones laborales. La normativa en igualdad se ha hecho más exigente y ya no sólo se centra en la obligatoriedad de contar con Planes de Igualdad, sino también en los registros retributivos y auditorías salariales, nivelaciones de puestos.
Para Aurora Sanz, socia directora de Laboral de Grant Thornton, "los nuevos cambios en la reforma laboral llevan a alcanzar una mejora en las condiciones laborales y en materia de igualdad. Debemos tener en cuenta que contar con un Plan de Igualdad va a ser de obligado cumplimiento para las empresas de más de 50 empleados y para acceder a ayudas, subvenciones, o licitaciones y trabajos para el sector público va a ser fundamental contar con este plan".
Mientras, el Instituto de Estudios Económicos de la Provincia de Alicante (Ineca) ha actualizado el informe que realizó en 2021 titulado Situación laboral de la mujer en la provincia de Alicante en el que analizaba los salarios, el nivel de formación y la evolución del empleo en nuestro territorio más próximo. El análisis refleja que se han producido avances tendentes al equilibrio, pero no son suficientes.
De un primer análisis se desprende que la situación ha mejorado sensiblemente pero quizás no al ritmo esperado. "La incorporación de la mujer al mercado laboral es un hecho irrefutable que en los escalones superiores de las carreras profesionales adolece de un verdadero impulso", explican. Asimismo, las carreras STEM siguen siendo poco atractivas para las mujeres, hay menos emprendimiento laboral y los salarios, a igualdad de formación, continúan por debajo de sus homólogos masculinos. A juicio del presidente de Ineca, Nacho Amirola, "es necesario un compromiso total de las instituciones y de las empresas para que la equidad laboral sea una realidad en los próximos años".
El informe, realizado por Francisco Llopis, director de Estudios de Ineca, ha revelado que dentro del ámbito societario de las empresas, las mujeres son minoría tanto a la hora de constituir la actividad como en la alta dirección. En cuanto a las sociedades constituidas, las mujeres solo representan un tercio del dato mostrado por los varones. Y aunque ha habido algún cambio en esta proporción, lo cierto es que al final de estas dos décadas la presencia de las mujeres no se ha incrementado.
Por su parte, la vicepresidenta económica de Ineca, Dolores Mejía, ha agregado que "para solucionar las diferencias salariales, romper los techos de cristal o desprenderse del ‘suelo pegajoso’ debemos trabajar en equipo. Solo con el compromiso de todos podremos lograr la equidad plena en nuestra sociedad. Y ese compromiso y unión de todos, debe estar acompañado de la implementación de políticas de igualdad, tanto en las empresas privadas como en los organismos públicos, que sean medibles para valorar los avances que se producen en el tiempo".
Recientemente, el Observatorio de la Vulnerabilidad de la Fundación Adecco ha presentado el 11º informe #EmpleoParaTodas: la mujer en riesgo de exclusión en el mercado laboral. Se trata de un trabajo que basa sus conclusiones en el análisis e interpretación de los resultados de la Encuesta de Población Activa del 4º Trimestre de 2023, junto a la consulta de otras fuentes de referencia, y una encuesta a 200 mujeres mayores de 50 años en riesgo de exclusión social.
En este caso, el estudio revela que un 20,6% de las mujeres en activo en la Comunitat Valenciana ya supera los 55 años -hace 10 años eran el 13,6%-. Sin embargo, el 82% de las desempleadas sénior siente discriminación en su acceso al mercado laboral. En este sentido, el estudio explica que un 77,4% de ellas destaca que esta discriminación se ha producido en la entrevista de trabajo, donde se ha cuestionado su capacidad para manejar nuevas tecnologías, ser dirigida por líderes más jóvenes o la posible sobre cualificación.
Además, según Adecco, la discriminación laboral por edad supone una gran contradicción, teniendo en cuenta que las mujeres mayores de 55 años ya alcanzan la cifra de 220.700 mujeres que tienen trabajo o lo buscan en la Comunitat. "Muchas de las mujeres sénior en desempleo se incorporan al mercado laboral pasados los 50 años, tras largos periodos de inactividad y una vida dedicadas a su familia. A menudo, cuentan con trayectorias laborales más intermitentes que los hombres y su carrera profesional goza de un menor reconocimiento social, por lo que son las primeras en retirarse del mercado laboral cuando la situación familiar lo requiere".
En este sentido, "buscan trabajo para apoyar economías domésticas resentidas por las sucesivas crisis, o bien para asegurar un mejor futuro para ellas mismas o sus hijos. El proceso no es sencillo y encuentran dificultades mayúsculas para competir en el mercado laboral, con gran predisposición al desempleo de larga duración", según explica Begoña Bravo, directora de Integración e Inclusión de la Fundación Adecco. Y es que, el 59% de las mujeres mayores de 50 años en desempleo lleva más de un año buscando trabajo, frente al 40% de las mujeres de todas las edades.