Libros y cómic

conversaciones culturplaza

Claudia Piñeiro: “Ahora la novela negra se plantea nuevas preguntas”

  • Foto: ALEJANDRA LÓPEZ

VALÈNCIA. Inés es madre, asesina, amante y ante todo… amiga. Es también la protagonista inigualable de El tiempo de las moscas, una novela negra con la que la argentina Claudia Piñeiro rebusca en la clave noir, aprovechando la excusa de un crímen para hablar sobre el deseo, la maternidad y los miedos. Su protagonista mata a la amante de su exmarido e ingresa en la cárcel, donde tiene la fortuna (o desgracia) de conocer a la Manca, quien se convierte en su mejor aliada y con la que planea su próximo "atraco". Su estancia en prisión por 15 años le hace acercarse a las mujeres de otra manera y comprender determinados roles que dirigen (y rigen) la sociedad; a su vez ve constantemente en su ojo una mosca negra, que no le permite avanzar ni trabajar, pero si recrearse en lo molesto que resulta ver algo que interrumpe la contemplación de lo que la rodea. 

Para la autora la novela lejos de hablar de asesinatos, maternidad y feminismo se centra en la amistad: “Va sobre amistad y sobre nuevas oportunidades. También es una novela para poderse sacar de encima ciertos rótulos que nos pone la biología, que uno mismo puede decidir que sean otros”. Todo ello se complementa en el relato con personajes con una potencia increíble y con Inés, que narra sus pensamientos escondidos entre paréntesis y cursivas para dar pistas al lector de lo que se viene por delante. Claudia Piñeiro conversa con Culturplaza desvelando las claves de El tiempo de las moscas, además de descubrir el por qué de su relato y en parte los motivos de la asesina, o tal vez no, quizás eso debería averiguarlo el lector. 

Foto: ALEJANDRA LÓPEZ

-Entre las páginas de El tiempo de las moscas se ve entre paréntesis el pensamiento del personaje principal, ¿qué importancia tiene meterse en la cabeza del narrador? 

-A mi me parece que cuando hay un narrador en primera persona, puede ser un narrador sincero o un narrador insincero, pero lo que nos está contando es que creemos que es lo que pasa en su cabeza, no es una tercera persona mirando desde afuera, sino es el mismo. Lo que le pasa a Inés es que a esta altura de haber salido de la cárcel 15 años después, encontrarse con un mundo que cambió tanto desde el punto de vista del lugar de la mujer en el mundo, etc. Hay cosas que ella aprendió, que ya no diría, porque ya antes era una mujer absolutamente machista y conservadora, sabe que muchas de las cosas que pensaba antes no están bien vistas, algunas tampoco ella ya las cree ni las considera, pero hay algunas otras que le cuesta cambiar, todavía ese cambio le lleva algún esfuerzo, y hay algunas cosas que se atreve a decir y hay otras que no.

-¿Hasta qué punto debe conocer el lector como podrá actuar el protagonista?

-Lo que está entre paréntesis es aquello que no se atreve a decir públicamente, pero yo creo que el lector debe saberlo, porque lo que entiende de esa manera es el proceso que hace esta mujer para cambiar desde su posición absolutamente conservadora y machista, que consideraba que el rol de la mujer era uno determinado de acuerdo con las normas más o menos establecidas en el mundo occidental donde rige el patriarcado,y esta nueva Inés que está aprendiendo a ser otra, gracias a los cambios que se le produjeron dentro de la cárcel, conociendo muchas mujeres diferentes y también sobre todo gracias a su amistad con la Manca, con la amiga que emprende esta aventura.

-¿Cuáles son tus claves para escribir novela negra?

-Siempre sé muy bien cómo empieza, me imagino hacia dónde va y cómo va a terminar, pero en el medio hay cosas que no tengo previstas y que cuando empiezo a escribir y aparecen, hacen en algunas oportunidades que yo cambie el rumbo  diagramado en mi cabeza con anterioridad. Nunca escribo una escaleta. 

-¿Y en el caso de esta historia?

-Sé muy bien quiénes son los personajes, sé hacia dónde van,  pero me dejo cierta libertad en ese camino. En el caso de esta novela, estuve mucho tiempo dándole vueltas a ver quién iba a ser la víctima. Me parecía que eso había que definirlo muy bien desde el principio,me llevó mucho tiempo decidir  cómo iba a ser esa parte de la novela.  Por eso creo que también puede generar cierta sorpresa o puede tener una tensión dramática que a mí me interesaba que tuviera, porque lo pensé mucho.

-¿Qué momento consideras que está viviendo el género?

-La novela negra siempre es una novela que goza de buena salud, ¿no?  O sea, yo desde que escribo escucho: “Uy, qué bien que le va la novela negra”. Imagino que siempre le ha venido bien, con mayor o menor prestigio, de acuerdo con los escritores que la están escribiendo. En Argentina en particular no tenemos este problema del prestigio con la novela negra,  porque nuestros más grandes escritores fueron fanáticos de la novela negra,  la editaron, la tradujeron, la escribieron.

"Considero que la novela negra es la novela que mejor cuenta a las sociedades. Porque para comprender una sociedad hay que contar los crímenes que ahí se cometen"

-¿Cuál es la clave del éxito?

-Considero que la novela negra es la novela que mejor cuenta a las sociedades.  Entonces, por eso también el prestigio del que goza y la actualidad y el interés en los lectores, porque para comprender una sociedad hay que contar los crímenes que ahí se cometenY en ese sentido, me parece que la incorporación de todas las mujeres ha hecho que se empiecen a contar  algunos crímenes que no se contaban tanto, ¿no?  Como los feminicidios y la trata de mujeres o las muertes en abortos, etc. Que antes el rol de la mujer en la novela policial era un poco más de otro tipo

-¿Cuál es el estado de la novela negra?

-A mí me parece que la novela goza de salud porque se trata de extender los límites, ya no responde solamente a la pregunta ¿Quién lo mató? y ¿Por qué? que sería como la clásica novela negra de algún tiempo. Me parece que se hacen otras preguntas y se buscan otras respuestas y eso hace que se esfuercen los límites del género, que se expanda el género hacia otros lugares y que le dé mucha vitalidad.

-De cara al final del libro se habla mucho del feminismo, ¿qué ha supuesto incluirlo en la obra de esta manera?

-Inés y la Manca salen al mundo y se encuentran con los mismos problemas que nos encontramos las mujeres  y esos problemas son los que debate el feminismo, si nos pagan lo mismo por igual salario, si tenemos que cuidar hacer cuidados de nuestra familia gratuitamente, si nos matan o no nos matan, si podemos disponer libremente de nuestro cuerpo o no  si podemos planificar nuestra vida profesional, laboral, afectiva, etcétera o no todas esas cuestiones que nos afectan a las mujeres las trata el feminismo.

Recibe toda la actualidad
Valencia Plaza

Recibe toda la actualidad de Valencia Plaza en tu correo